El estreno de un lugar especial

Aquienes conozcan el representativo quiosco del Parque de la Concordia les costará reconocer que el que hoy abre sus puertas es el que suma décadas y más décadas de historia. Una imagen totalmente remozada, moderna y novedosa impera en un lugar convertido en todo un emblema en la capital. A las siete de la mañana, Juan Luis Aceituno Valdivia, un hostelero con recorrido en el sector, emprende una aventura en solitario que le llevará a sumar experiencia desde el corazón de la ciudad. Su objetivo es ofrecer los mejores productos, a precios asequibles, en un entorno que es santo y seña de los jiennenses. El quiosco salió a concurso, el año pasado, después de expirar la concesión municipal. Pujaron cuatro empresas y, finalmente, ganó la propuesta de Aceituno Valdivia. El proyecto lo diseñó el conocido estudio de arquitectura de Ramón Cuenca, en estrecha colaboración con María Jesús López, de Actualia. “La verdad es que se han portado genial. Son los dos grandes profesionales. No hace falta más que venir para comprobarlo”, expone el empresario. De líneas repletas de sobriedad y elegancia, destaca por un aspecto diferente y moderno, sin perder la esencia del sitio en el que se encuentra. El quiosco, utilizado como bar y cafetería hasta hace unos meses, está situado en el gran espacio verde que ideó Luis Berges en su Plan de Ensanche de 1927. Justo en el corazón de la ciudad. Grandes ventanales imperan en el exterior de un edificio singular en el que el contacto con la calle es su principal seña de identidad. Un salón diáfano destaca en su interior. Sin duda, un diseño que contribuirá al embellecimiento de una zona que recoge la tradición de los viejos parques decimonónicos, con coníferas, hoja caduca y perenne.