El 1,5% de Fomento se destinará, si llega, a los Baños del Naranjo

El último maltrecho monumento jiennense en el que se ha puesto el foco es San Miguel. Los socialistas reclamaron que el Ayuntamiento opte a los fondos del 1,5% cultural, que concede el Ministerio de Fomento, para su recuperación. La idea cuenta con el respaldo de colectivos como “Iniciativas, andamios para las ideas” o “Patmos”. El alcalde, Javier Márquez, no lo ve mal, de hecho reconoce, como cualquier jiennense, que son muchos los rincones del casco histórico en los que es preciso intervenir. Pero San Miguel, por el momento, tendrá que esperar porque los planes del Gobierno local son otros y pasan por acometer obras en los Baños del Naranjo. El motivo es que los trabajos de recuperación en el monumento que, en su parte más antigua, data del siglo XI, está, en palabras del regidor, “a medio terminar”. Márquez también admitió que no hay certeza de que el Gobierno atienda la solicitud de Jaén, al tener que superar una dura criba, en competencia con acciones de miles de municipios españoles.

El proyecto para evitar el derrumbe de los Baños del Naranjo se terminó hace un lustro, en enero de 2013. Se acometieron aprovechando un proyecto de empleo para jóvenes de la Administración General del Estado, financiado con fondos de la Unión Europea y municipales. Unos fondos que sirvieron para limpiar y reparar la estructura del inmueble, de titularidad municipal que, en aquel momento, se reconoció que estaba muy deteriorado. Participaron 15 alumnos del Imefe en esta actividad, en un curso que comenzó en junio. El Gobierno local entonces, presidido por José Enrique Fernández de Moya, y en el que Márquez era el concejal de Urbanismo, competencia que aún mantiene, planteó el edificio como futura sede del Centro de Interpretación de la Judería. Su ubicación, en la calle Los Caños, da sentido a este fin. Los restos de los baños están integrados en las Carnicerías Públicas.

san miguel. En cuanto a la recuperación de San Miguel y la Casa de la Virgen, el máximo responsable municipal reveló que existe un problema para su rehabilitación, ya que sacó a relucir un informe de la Consejería de Cultura, preceptivo y vinculante, que, según él, complica el derribo de las viviendas que rodean los restos del antiguo templo, que, de hecho, no son visibles por estar ocultos tras las casas. “Me resulta extraño, porque al Camarín de Jesús le sucede exactamente lo mismo y no hubo problemas”, apuntó, no obstante Márquez.

En cuanto a su hipotético uso, en el caso de que se frene su ruina y, finalmente, se destine a un uso ciudadano, dice que todavía es pronto para hablar sobre ello. Lo que sí dejó claro es que, al contrario de lo que aseguró el PSOE, no existe proyecto alguno “ante la Administración” para reconvertirlo en Archivo Municipal, a lo que finalmente se destinó el Banco de España, obra contemporánea, de gran valor, firmada por el arquitecto Rafael Moneo. “Es solo una declaración ante los medios”, insistió el alcalde sobre las afirmaciones del principal partido de la oposición municipal.

Lo que sí es cierto es que San Miguel y la Casa de la Virgen, en el mismo conjunto monumental, están en peligro de ruina como advierte la Asociación Hispania Nostra.