Dos incendios sin heridos en un día en Mancha Real y Monte Lope

Ninguno de los incendios ha provocado heridos, pero sí daños materiales

17 jul 2017 / 11:42 H.

E l municipio de Mancha Real y la pedanía de Monte Lope Álvarez, una pedanía de Martos, fueron las protagonistas de la jornada con dos incendios, de relativa gravedad, que pusieron en alerta a los vecinos de la zona y provocaron algún que otro susto, que finalmente no llegó a más. Además, un turismo se pegó fuego en la capital jiennense, pero sin dejar heridos.

El primero de ellos se produjo en la cocina de un bar de una pedanía de Martos, en la calle Baena, número veinte, alrededor de las siete de la mañana. Hasta el lugar, tuvieron que trasladarse seis profesionales de Bomberos con una bomba urbana pesada, aunque fueron los propios vecinos los que apagaron el incendio con extintores al no poder hacerlo el propietario del local, por lo que los profesionales solo tuvieron que ventilar la vivienda superior y revisar la zona. La propietaria del bar y dos vecinos de la zona tuvieron que ser atendidos por los servicios sanitarios debido a una inhalación de humo, por la que los vecinos afectados tuvieron que ser trasladados a un centro sanitario para asegurar descartar cualquier complicación. El incendio finalmente se quedó en un susto, sin provocar más daños ni heridos. También colaboraron en la operaciónla Guardia Civil y la Policía Loal de Martos. Los bomberos no hicieron público el motivo oficial del incendio ni su origen.

Por su parte, en Mancha Real, en la calle Alfonso Martínez de la Hoz, a la altura del Bar “Chanquete”, se produjo otro incendio, con grandes cantidades de humo negro que provocó la tensión y miedo entre los propietarios de alrededor. Se trató de una sala de contadores de uno de los bloques de viviendas intalados en la zona. Todo apunta a que el motivo fue una sobrecarga de los contadores de la habitación que provocó la gran humareda, pero que los agentes trasladados a la zona, Bomberos, Policía Local y los operarios de Endesa pudieron sofocar rapidamente. Los operarios tuvieron que cortar las luz para evitar mayores daños, aunque horas más tarde todo volvió a la normalidad, con el tráfico y la luz de vuelta, para tranquilidad de los vecinos de los alrededores, anque ninguno tuvo que ser atendido por inhalación, por lo que todo se quedó en un susto.

Más entrado el día, sobre las siete de la tarde, se produjo otro incendio, en este caso de un incendio, en el kilómetro 55.8 de la A-44, que no se saldó con heridos, pero al que tuvo que trasladarse un grupo de cuatro efectivos de bomberos y una bomba urbana pesada para sofocar el fuego del coche. Un día marcado por incendios leves pero de los que no se tuvo que lamentar ningún incidente mayor y todos se quedaron en sobresaltos, algo positivo en una época de máxima precaución debido a las altas temperaturas y el riesgo de existente en todos los lugares de la provincia.