Detenida en un tanatorio por “liarla”

La Policía Nacional de Jaén ha detenido a una vecina de la capital, de 31 años, por montar un escándalo en un tanatorio de la capital jiennense. Presuntamente, increpó a las personas que se encontraban velando a sus familiares difuntos y, posteriormente, agredió e insultó a los agentes que acudieron al lugar tras recibir una llamada de auxilio en la sala operativa del 091. Incluso, llegó a dar un bofetón a uno de los funcionarios cuando le pidió la documentación

Según explica la Comisaría en un comunicado, la mujer llegó a la cafetería del tanatorio sobre las cuatro de la madrugada. No consta que tuviera relación con ninguna de las familias que, a esa hora de la madrugada, se encontraban velando a sus difuntos. Tras tomarse varias consumiciones, comenzó a increpar a las personas que se encontraban en las distintas salas. En vista del cariz que estaba tomando la situación, el personal del negocio le solicitó que abandonara las instalaciones. La mujer se negó. Es más, según la Policía, “reaccionó de forma violenta”. Ante su actitud, alrededor de las siete de la mañana, los trabajadores solicitaron a la Sala Operativa del 091 auxilio policial. En cuestión de minutos, se desplazó hasta el lugar una patrulla de la Brigada de Seguridad Ciudadana. A su llegada, la arrestada se dirigió a los agentes de forma agresiva y violenta. En concreto, según la Comisaría, les soltó expresiones como: “Sí, yo he sido la que la ha liado”.

Fue entonces cuando los policías le pidieron su identificación, al mismo tiempo que le retiraban un vaso de cristal que portada en una de sus manos. En ese momento, la mujer reaccionó violentamente y propinó un fuerte bofetón en el rostro a uno de los funcionarios. Además, se dirigió a los demás miembros de la dotación “con insultos y expresiones soeces”. Finalmente, fue reducida y arrestada.

Durante el traslado a las dependencias policiales, la agresora, según informa la Policía Nacional, intentó autolesionarse en varias ocasiones, algo que evitaron los agentes. Durante todo el trayecto e, incluso en los calabozos, continuó con insultos, incluso al letrado que la asistía de oficio. Dos de los agentes que intervinieron tuvieron que ser atendidos por sanitarios por diferentes lesiones debido a la agresividad de la arrestada. La mujer, a la que le constan antecedentes policiales por diez detenciones por hurtos y atentado contra las agentes de la autoridad, se encuentra ya en libertad con cargos.