Condena a una guardia civil por inventarse que la habían violado

La agente realizaba el curso de suboficiales en la Academia de Baeza

    05 mar 2016 / 10:35 H.

    Una agente de la Guardia Civil en activo ha sido condenada por inventarse que había sido víctima de una agresión sexual en la madrugada posterior al último día del curso de ascenso a suboficiales del año 2011, realizado en la Academia de Baeza. El Juzgado de lo Penal número 4 de Jaén ha considerado a Isabel V. T. autora de un delito de denuncia falsa y le impone el pago de una multa de 3.120 euros. La sentencia, que acaba de ser notificada a las partes, todavía no es firme y se puede recurrir ante la Audiencia.

    Los hechos se remontan al 13 de mayo de 2011. Esa tarde, la agente presentó la denuncia que ahora la ha convertido en autora de un delito. A sus propios compañeros relató que, durante la madrugada, fue abordada por un desconocido en el trayecto desde un pub de Baeza hasta su casa. En un primer momento, el chico se ofreció a acompañarla. Sin embargo, un poco más adelante, la guardia civil explicó que la sujetó, la apoyó contra la pared, le bajó los pantalones y la violó. Después, simplemente, se marchó, amenazándola para que no dijera nada.

    La historia generó un extraordinario revuelo. Llegaron hasta Baeza los mejores especialistas de la Comandancia de Jaén, que realizaron una investigación “minuciosa y exhaustiva”. Examinaron varias cámaras de seguridad, interrogaron a testigos y analizaron sospechosos. Incluso, pocas horas después, realizaron una reconstrucción de los hechos por las calles de Baeza en la que participó la “víctima”. Sin embargo, los agentes emitieron un informe concluyente: la agresión sexual nunca se produjo. Los investigadores comprobaron que, entre otras cosas, la mujer nunca se quedó a solas aquella noche en la que salieron a celebrar que habían acabado el curso de ascenso a suboficiales. Por ello, la causa fue archivada por el Juzgado de Baeza el 9 de junio de 2011, una decisión que fue ratificada por la Audiencia en octubre.

    A partir de entonces, se abrió un nuevo procedimiento contra Isabel V. T. por inventarse la historia. En su declaración como imputada, en febrero de 2012, la agente cambió de versión y dijo que la violación se produjo en el interior del pub. Y en el juicio, celebrado hace unos días, la acusada aclaró que no mintió. Añadió que, cuando ocurrieron los hechos, no estaba en condiciones de declarar, que se encontraba asustada, nerviosa y bloqueada. De hecho, su defensa habló directamente de “presiones” de los interrogadores.

    Sin embargo, el juez del Penal 4 es contundente y considera que Isabel V. T. se inventó toda la historia. Se apoya en la “contundente y muy exhaustiva investigación” de la Guardia Civil, que desmontó paso por paso la versión de la denunciante. Según su señoría, eso fue lo que hizo que cambiara su declaración y que dijera que la supuesta agresión no ocurrió en la vía pública, sino en el interior del pub. El magistrado recuerda que la propia agente participó de forma voluntaria en la reconstrucción de los hechos en las calles de Baeza y en la inspección ocular del callejón donde ocurrió la violación.

    La sentencia establece que el motivo de la invención pudo ser un incidente que tuvo Isabel con la oficial de guardia en la Academia cuando regresó aquella noche y que intuyó que podía conllevarle “consecuencias disciplinarias”.