Científicos lanzan una crema antienvejecimiento con aceite

Ya en la Roma Antigua, las mujeres usaban el aceite de oliva como un cosmético más. Lo guardaban en el cajón de su coqueta para utilizarlo cuando se iban a embellecer. Algo sospecharían o notarían cuando lo consideraban un producto hidratante que resaltaba la belleza. Este “truco” de belleza pervivió durante siglos y siglos hasta que, ahora, una empresa acaba de patentar y lanzar al mercado un sérum que deja claro que previene el envejecimiento o, lo que es lo mismo, la oxidación y las arrugas en la piel.

Se llama Maximum y pertenece a Tergum Cosmetic, que es una empresa de base tecnológica que nace del Departamento de Química Analítica de la Universidad de Córdoba. “Llegué de trabajar en Alemania dentro del sector hospitalario. Sé que aquí existe capacidad de investigación, innovación y desarrollo, por lo que me puse a investigar proyectos que se hacían en Andalucía. Tuve bien claro que el equipo de investigación de María Dolores Luque era muy bueno, por lo que sabía que era una gran oportunidad. No obstante, no quería lanzar una industria cosmética al uso, sino desarrollar dos productos muy potentes que se comercializaran bien”, explica Ignacio Cantonnet, uno de los socios de la compañía.

Este equipo solicitó al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) que midiera la capacidad para absorber radicales libres del producto. Se llevaron una gran sorpresa porque un gramo de esta crema realizada con aceite de oliva era 1.800 veces más potente que la misma cantidad de Vitamina C. “No elegimos el aceite de oliva por casualidad. Se trata de un producto totalmente natural, por lo que se minimizan las reacciones adversas. Además, se trata de una grasa muy similar a nuestra piel”, continúa Ignacio Cantonnet. Asimismo, los estudios constataron que dispone de efectos antiinflamatorios, mejora el riego sanguíneo en la piel y protege de la oxidación.

Cecofarma fue la distribuidora que creyó en el proyecto y comenzó a distribuir el sérum. “Al principio, todos eran reacios porque este tipo de productos se sustentan en potentes campañas publicitarias, que nosotros no podíamos hacer. En cambio, se sorprendieron porque las farmacias que la tenían, al poco tiempo, pedían más. Era una prueba de que los que los compraban volvían a repetir”, afirma este socio del proyecto.

Dice que Maximun solo cuenta con dos ingredientes: aceite de oliva y extracto fenólico de la aceituna, aunque la clave para que se encuentra en mezclarlos —es tan difícil cómo unir el aceite y el agua—. El zumo de aceituna se selecciona para que cuente con las máximas propiedades, al igual que el extracto fenólico. “Generalmente, cogemos aceites que, también, luego utilizamos nosotros para desayunar”, afirma Ignacio Cantonnet. Ahora, la empresa se encuentra en plena labor de capitalización para lanzar con más fuerza este producto porque confía ciegamente en sus bondades.