“Cazados” 25 conductores bajo los efectos de las drogas

Preocupación por el aumento de los positivos por consumo de estupefacientes

18 ago 2017 / 11:39 H.

Es más probable cruzarse en la carretera con un conductor drogado que con uno borracho. Así lo confirman las cifras que maneja la Dirección General de Tráfico, que se apoyan en las diferentes campañas de control. La última también confirma un preocupante aumento de los casos de conductores que se ponen al volante bajo los efectos de las sustancias estupefacientes. En tan solo cinco días, los agentes de la Guardia Civil han “cazado” a 25 personas que habían tomado algún tipo de droga antes de ponerse a los mandos de un coche. Es una cifra altísima, sobre todo si se tiene en cuenta que se han hecho 91 pruebas salivales. El porcentaje, por lo tanto, es superior al 27 por ciento. Se trata de una cifra muy superior a los positivos por bebidas alcohólicas. Y es que, en ese mismo periodo, los agentes han efectuado 3.153 controles de alcoholemia. En solo 66 casos, el conductor superaba el límite permitido, es decir, poco más del 2 por ciento del total.

Los resultados de esta última campaña específica ponen de manifiesto un incremento de los positivos, tanto de alcohol como de drogas. Hace apenas dos meses, Tráfico desarrolló una campaña similar en las carreteras de la provincia: entonces, los resultados fueron inferiores: 0,44 por ciento en las alcoholemias y 17,72 por ciento para las pruebas de detección de estupefacientes. ¿Qué está pasando? Guardias civiles con años de experiencia en la carretera explican que el incremento puede tener una justificación en el hecho de que, durante el pasado puente, prácticamente toda la provincia ha estado en fiestas.

La Dirección General de Tráfico avisa de que la alcoholemia se detecta después de consumir alcohol —en las horas posteriores—. En cambio, el consumo de droga se prolonga durante días. Por eso, una persona que haya consumido cocaína o cannabis —las sustancias más detectadas— durante el sábado, por ejemplo, puede dar positivo un martes en una prueba que realice la Guardia Civil. Los controles de drogas, que son obligatorios, son ahora muy selectivos. Por lo general se hace después de que el alcohol diese negativo y los agentes sospechen de que el conductor ha podido consumir algún tipo de sustancia prohibida. Entonces, se recoge una muestra de saliva del conductor con una especie de chupete. Si el resultado de esta muestra indiciaria es positivo en alguna droga, el coche quedará inmovilizado.

Según la Jefatura Provincial, en la última campaña, las sustancias psicoactivas más consumidas fueron el cannabis, la cocaína y las anfetaminas, que producen en la conducción síntomas de relajación, menor concentración, percepción alterada o limitación de la velocidad, entre otros efectos.

m il euros de multa y seis puntos menos

La sanción por conducir tras haber tomado drogas asciende a mil euros y conlleva la retirada de seis puntos del carné. En el caso del alcohol, la multa es de 500 euros, salvo si la tasa supera el doble de lo permitido o si el conductor es reincidente, es decir, aquel que hubiera sido sancionado en el último año. En estos casos, la multa también es 1.000 euros.