Cáritas celebra el aumento de donativos de privados

La organización insiste en ayudar a que las familias salgan de la pobreza con microcréditos para el autoempleo

24 may 2016 / 10:22 H.

Los donativos de particulares que recibió Cáritas, durante 2015, tuvieron un incremento significativo respecto al año anterior, de 175.134,69 euros. Una subida que contrasta con el descenso de las subvenciones en IRPF, Junta y Fondo Social Europeo, entre 2014 y 2015, de 185.894,78 euros. En la interpretación de la radiografía obtenida de los recursos recibidos y los empleados en la memoria de 2015, el director de Cáritas Diocesana de Jaén, Rafael López-Sidro, calificó de “esperanzador” el incremento desde el sector privado. “Además, hay que tener en cuenta el retraso de los pagos, ya que a 31 de diciembre se nos debía 708.774,21 euros de subvenciones, lo que supone un 79,63% del total concedido, por lo que estamos al filo de la navaja”, indicó López-Sidro.

En cuanto al empleo de estos recursos, el representante de Cáritas recordó que la mayoría fue para atención primaria, para alimentación. En este sentido, explicó la postura en contra del sistema “injusto” de reparto de Fega —del Ministerio a través de Fondos de la UE—. “Traen productos sin preguntar a las familias qué necesitan y solo entregan legumbres y pasta”, criticó López-Sidro, para informar del sistema de “despensa solidaria” que funciona en algunas parroquias para que las familias se abastezcan de los productos que realmente necesitan. “De esta forma, avanzamos en el trato digno de estas personas”, dijo.

Asimismo, Rafael López-Sidro enumeró los gastos realizados en los programas de asistencia y acogida, en los que se incluyen las ayudas para luz, agua y alquileres de vivienda, principalmente. En esta línea, el director fue tajante en la idea de ayudar lo que sea necesario, pero con el objetivo de no hacer “dependientes” a los más pobres de estas subvenciones. “No es suficiente con dar estos servicios. Nosotros pretendemos poner los pilares para que salgan de la pobreza”, apuntó López-Sidro, quien destacó que no se puede “mantener a la gente en la miseria”. Para ello, hizo hincapié en los microcréditos que les facilitará La Caixa con un millón de euros. De hecho, mostró su interés por la economía social. “Se pretende que quienes se beneficien de estos microcréditos puedan montar sus propios negocios y se cree autoempleo”, explicó.

Por su parte, el vicario episcopal de Comunicación, Antonio Garrido, destacó que con estos datos se pone “rostro” a las vidas y los problemas de las familias necesitadas. Mientras, el delegado episcopal de Cáritas, Juan Raya, valoró la labor de la organización. “Hablamos de historias de familias, migración, frustraciones, lucha. Y al lado de ellas siempre hay alguien de Cáritas, cuyo tesoro son sus trabajadores y voluntarios”, manifestó Raya. El vicario general, Francisco Juan Martínez Rojas, recordó que Cáritas es más que una ONG. “Es Iglesia, Evangelio, culto y caridad”, dijo. Asimismo, manifestó la necesidad de reivindicar a las conciencias de los políticos para que conozcan las realidades. “Como positivo, tenemos el crecimiento de las aportaciones de los particulares”, indicó.

Finalmente, los presentes en la mesa recordaron al obispo saliente, Ramón del Hoyo, quien siempre participó con Cáritas y estuvo en las presentaciones de las memorias.

Más ayuda a los indigentes con el centro Santa Clara

Entre los servicios que ofreció Caritas durante 2015 fue la apertura del nuevo Centro de Día Santa Clara, uno de los más destacados. El director de la organización eclesial, Rafael López-Sidro, apuntó que atienden a una media diaria de 30 personas. Sin embargo, recordó que, en la actualidad, hay “entre 40 y 50” indigentes que viven permanentemente en la calle. Una situación para la que anunció que firmarán un convenio con el Ayuntamiento que permitirá que esas personas puedan permanecer, como mínimo, un mes en el Albergue Municipal.

Respecto al perfil de estas personas, López-Sidro aclaró que se trata de padres de familia que se van de sus casas por diferentes motivos y que acaban en la calle sin importarles nada. “Al final se enganchan al alcohol y a la droga, con una mala alimentación”, matizó. Respecto a los que piden limosna, el presidente mostró su rechazo. “Darles dinero es profesionalizarlo. Además esas monedas acaban casi siempre en alcohol”, criticó, para apuntar que si necesitan algo hay organizaciones que les ayudan.