Avionetas protegen la cosecha

Comienzan las fumigaciones para reducir las moscas que pican las aceitunas

10 ago 2016 / 15:30 H.

La cosecha es un tesoro que pronto dejará alrededor de dos mil millones de euros en Jaén. Por eso, todos los esfuerzos son pocos para protegerla. Mientras que los agricultores, como si fueran soldados de infantería, trabajan para mantener los riegos, evitar la evaporación, quitar las varetas y pronto se pondrán a hacer los ruedos para que no se le “pierda” ni una aceituna, las aeronaves se incorporan a esta singular guerra. Avionetas comienzan a fumigar.

Juan Luis Ávila, además de secretario general de COAG, es biólogo. “Trabajé durante ocho años en el control y en el tratamiento de plagas donde hay unos protocolos muy estrictos. Sin embargo, cuando se establecen tratamientos es porque existe una incidencia elevada que te obliga a intervenir”, añade. Las avionetas harán pasadas por las sierras, que es donde se produce la mayor concentración. Y tiene su lógica. Con el calor, la mosca del olivo busca zonas más frescas de la provincia, por lo que se produce una mayor aglomeración en las montañas.

Las intervenciones requieren de un protocolo coordinado. Por ejemplo, a los apicultores se les informa de cuándo realizarán las pasadas para que, esos días, no abran las colmenas —y no salgan las abejas para que no mueran—. Además, no se fumiga todo, sino que se hace por partes, pero el fitosanitario lleva un cebo para atraer a la mosca. Así acuden, como si fuera miel, a la zona del veneno.

En segura. La Denominación de Origen “Sierra de Segura” aprobó los tratamientos contra la mosca del olivo en la comarca segureña, con las excepciones que establezca en cada momento la Junta de Andalucía. Esta acción cuenta con la participación de todas las almazaras y cooperativas inscritas, así como cooperativas que no forman parte del consejo, pero que colaboran estrechamente con la entidad en el control de esta plaga. Hay 28 entidades y más de 9.000 agricultores forman parte de esta campaña de tratamiento contra la mosca del olivo, que es clave para mantener la calidad. Precisamente, el consejo regulador desarrollará tratamientos integrados bajo la supervisión de los técnicos. Por eso, aclara que no serán sistemáticos, sino focalizados en las zonas necesarias por la alta concentración de la mosca del olivo. Se denominan “por parcheo y colectivo”, ya que se utiliza la cuarta parte del insecticida empleado en un tratamiento individual, por lo que presentan una mayor sostenibilidad medioambiental.

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Zonas. Jaén cuenta con zonas, como la Sierra de Segura, que se tratan prácticamente todos los años. Allí se produce una importante cantidad de mosca.

Sostenible. Los fitosanitarios que se lanzan están muy controlados. Además, tienen sustancias atrayentes para reducir la cantidad.

Colmenas. Al intentar matar las moscas se puede acabar con las abejas. Por eso, existe un plan que informa a los apicultores para que cierren las colmenas.