Arranca la movilización social por la “Fuente de la Peña”

Aviso a navegantes: el rechazo a la cantera que está “devorando” la Fuente de la Peña nace del “sentimiento” hacia una “seña de identidad” de la ciudad; se fundamenta en la sospecha de que está vulnerando la Ley, y no va a apagarse hasta que la actividad minera se paralice y se garantice que no se reactivará jamás. Grosso modo, estas son las ideas del manifiesto que, ayer por la tarde, empezaron a redactar las asociaciones culturales, ecologistas y vecinales que se han unido, como mosqueteros, contra lo que consideran “una barbaridad”, un “atentado” contra el patrimonio natural y cultural de la ciudad. El escrito irá acompañado de una recogida de firmas, pero aún hubo más acuerdos.

De la reunión, que se celebró en la residencia de mayores que lleva el nombre del monte que están “desmontando”, salió también un calendario de movilizaciones, la primera de las cuales ya tiene fecha: el próximo domingo, 12 de febrero, a las 11 de la mañana. Partirá de la glorieta que hay frente al Parque del Seminario y terminará a los pies de la cantera, en la explanada conocida como el Ojo de Buey, donde, con el lema “Salvemos la Fuente de la Peña”, los asistentes exigirán el cese de la actividad minera y el cierre de la cantera. “Por encima de las cuestiones legales, que están en manos de la Fiscalía, queremos manifestar el sentimiento social contra lo que están haciendo. ¡Y lo haremos luchando con todos los medios jurídicos y sociales que tenemos a nuestro alcance!”, promete la presidenta de “Iniciativas, andamios para las ideas”, Marina Heredia, que advierte: “El alcalde no puede mirar hacia otro lado ni aunque quiera”.

Pese a que la Junta asegura que la reactivación de la cantera cuenta con todos los permisos y, por lo tanto, las extracciones son legales, tanto “Iniciativas”, como “Ecologistas en Acción” dudan de ello. Los recelos tienen tal enjundia que esta es la primera vez que la formación ecologista ha interpuesto una denuncia ante la Fiscalía de Medio Ambiente. “Lo medimos mucho antes y lo hicimos porque creemos que los permisos han podido darse de una forma anómala”, indica el coportavoz de “Ecologistas”, Javier Ramírez. “Es un monte público [de titularidad municipal] y, cuando se dio la prórroga (en 2012), estaba protegido por otro plan anterior al PGOU con una protección muy explícita que impide que haya canteras”, subraya el activista. “Salvemos la Fuente de la Peña” ha unido colectivos vecinales, culturales y ecologistas movidos todos por un sentimiento: contener un daño que adivinan “irreparable”.