Archivado el caso del hombre que murió esperando al médico

El fiscal no ve delito y abre la puerta para que la familia acuda a la vía civil

22 ene 2019 / 10:58 H.

La Fiscalía de Jaén no ve delito en el caso de un hombre de 70 años que murió desangrado el pasado 20 de agosto tras sufrir la rotura de una variz y esperar en su casa durante más de una hora a que llegara la ambulancia. El Ministerio Público ha archivado las diligencias de investigación penal, pero abre la puerta para que la familia de la víctima pueda presentar una reclamación patrimonial contra la Consejería de Salud para ver si la “respuesta a esta situación de emergencia médica” fue la adecuada.

Las pesquisas efectuadas por la Fiscalía de Jaén ponen al descubierto que la esposa efectuó la primera llamada a las 13:38 horas de ese 20 de agosto y que la ambulancia y, posteriormente el equipo médico, no llegaron hasta las 14:41, es decir, 63 minutos después. Se da la circunstancia de que la familia vive en el Gran eje, a escasos cien metros del Hospital Médico-Quirúrgico. José Blas, la víctima, sufrió la rotura de una variz. No era la primera vez que le pasaba. Su esposa, Amelia, trató de contener la hemorragia, como ya había hecho otras veces. Pasados veinte minutos, vio que era imposible detener el sangrado y avisó al 061: Le dijeron que no había efectivos disponibles. Esa primera llamada se produjo a las 13:38 de la tarde.

El estado del paciente fue empeorando y la mujer, que estaba sola, telefoneó otras “tres o cuatro veces más” al servicio de emergencias. La familia asegura que el hombre se desmayó alrededor de las dos y media de la tarde. Desesperada, su madre volvió a llamar al 061, clamando para que le enviaran a alguien, porque su marido estaba muy grave. Entonces, enviaron una ambulancia, aunque sin equipo médico, solo con conductor. El chófer le dijo a la mujer que no podía hacerse cargo del paciente. Avisó al hospital y, en minutos, llegaron los sanitarios, que lo trasladaron al hospital pasadas de las tres menos veinte de la tarde. A las once y media de la noche, el enfermo falleció.

A través del Defensor del paciente, la familia presentó una denuncia en la Fiscalía por posible negligencia. “Queremos que se investigue, porque estamos seguros de que la muerte de mi padre se podría haber evitado. Algo falló”, lamentó José Luis, en una entrevista publicada por Diario JAÉN el pasado 14 de septiembre.

Tras recabar toda la documentación, el Ministerio Público entiende que no hay delito en este caso. Parte de la premisa legal de que una Administración pública como tal (en este caso la Consejería de Salud) está excluida de cualquier responsabilidad penal. A partir de ahí, el fiscal analiza la actuación individual de todas las personas que intervienen en el proceso: “No se puede hacer imputación penal alguna ya que estas posibilidades, dentro de sus posibilidades, informaron a la esposa del fallecido de la forma en que debía actuar para detener, al menos momentáneamente, la hemorragia, avisando entre tanto a los servicios de la ambulancia y al equipo técnico, que acudieron una vez requeridos y actuaron con la pericia propia de su profesión”, argumenta el fiscal Juan Antonio Muñoz Cuesta en su decreto de archivo.

Posteriormente, el Ministerio Público aclara que no puede determinar si toda la actuación supuso un funcionamiento normal de la maquinaria sanitaria o bien “pudo hacerse de forma diferente, con mayor diligencia y rapidez, y si ello se debería o no, a una deficiente planificación y desarrollo en la respuesta administrativa ante una situación de emergencia médica”. Por eso, abre la puerta a presentar una reclamación patrimonial contra la propia Junta de Andalucía.