Alumnos indemnizados por el retraso de 10 horas de un vuelo

Cada uno de los 70 estudiantes de “Las Fuentezuelas” recibe 240 euros

02 feb 2017 / 12:14 H.

Apenas acababa de empezar el curso y un grupo de estudiantes de cuarto de la ESO y de primero de Bachillerato del IES Las Fuentezuelas se dirigía, en pleno mes de octubre de 2016, hacia el aeropuerto madrileño de Barajas. Se trataba de un viaje de estancia en Inglaterra para realizar una inmersión lingüística para poder practicar su idioma de la mejor manera: con los propios ingleses.

Con todo planificado para que el avión saliera a las siete de la mañana, los 70 alumnos y 5 docentes no partieron en dirección hacia la isla británica hasta las cinco y media de la tarde. Es decir, diez horas de espera. Según cuenta el director del centro educativo, José Manuel Espinosa, propusieron a la empresa que les había organizado el viaje, Oxford Crew, realizar una reclamación a la compañía aérea Norwegian por la demora. “Sabíamos que legalmente había posibilidad de que les devolvieran el dinero, por lo que los de Oxford Crew nos dijeron que lo solicitarían”, cuenta Espinosa. Si bien podrían haber realizado la denuncia, familia por familia, al final optaron por hacerla en común con la intermediación de la empresa que gestionó el conjunto del viaje.

Fue en noviembre cuando recibieron la primera noticia: “Nos dijeron que parecía que sí nos iban a indemnizar, pero que, en ese momento, no había dinero para hacer frente a una devolución tan grande”, explica el director. La siguiente respuesta llegó en diciembre como un regalo de Navidad. “Nos aseguraron que para enero tendríamos el dinero, pero no nos dijeron cuánto”, recuerda. Sin embargo, su sorpresa fue cuando recibieron la cantidad definitiva después de que les admitieran la indemnización. “A cada alumno le han devuelto algo más de 240 euros por el retraso de más de diez horas”, afirma el responsable del IES Las Fuentezuelas. De hecho, indica que, con este dinero se cubre el coste de la ida y la vuelta del avión. “Valoramos la buena gestión de la empresa, pues los chicos perdieron, incluso, hasta una excursión que tenían programada ese primer día en Inglaterra, por lo que hemos podido resarcirnos”, cuenta José Manuel Espinosa. Por su parte, los jóvenes se mostraron muy satisfechos por el feliz final e, incluso, han propuesto hacer una reinversión para realizar otro viaje.

Por otra parte, el director del centro educativo asegura que, independientemente de la experiencia de la espera, los estudiantes llegaron muy contentos. “Se sintieron muy bien acogidos y aprendieron mucho”, indica. De hecho, Espinosa adelanta que tiene prevista la organización de otra estancia para otros cursos. “Sobre todo, porque somos un centro bilingüe en la Enseñanza Secundaria Obligatoria y porque aspiramos a que, el curso que viene, también sea en Bachillerato”, dice.