A un paso de que el nuevo acelerador lineal funcione

El Hospital está a la espera del informe del Consejo de Seguridad Nuclear

02 ene 2019 / 13:16 H.

Largo ha sido el camino desde que parte de uno de los dos aceleradores lineales que la Fundación Amancio Ortega facilitara al Complejo Hospitalario de Jaén llegara el pasado mes de mayo, cuando todavía estaban en marcha, incluso, las obras del búnker. Pero las previsiones, según explican desde Salud, es que se atienda a los primeros pacientes este mismo mes de enero. “Las pruebas ya han terminado, y el Hospital de Jaén está a la espera de recibir el informe favorable del Consejo de Seguridad Nuclear”, explican.

Pese a la complejidad del proceso —construcción del búnker y acondicionamiento de la zona, montaje del acelerador, calibraciones y puesta a punto del servicio de Radiofísica, permisos y controles—, se ha acortado el plazo previsto inicialmente para la puesta en marcha del nuevo equipo, lo que previsiblemente suponga también que se agilice la llegada del segundo acelerador lineal, prevista inicialmente para 2020. Según explicó recientemente el jefe de Radioterapia, Miguel Martínez, con respecto al proceso, una vez que entre en funcionamiento este tercer equipo, la intención es la de comenzar las obras para el desmontaje de uno que se encuentra ya obsoleto, por lo que durante un tiempo el Complejo Hospitalario de Jaén continuará su funcionamiento con dos aceleradores.

Eso sí, una vez que estén en marcha los tres equipos, se dará un salto cualitativo en la atención a los pacientes con cáncer, puesto que los tres equipos serán de la misma gama, de alta generación, y utilizarán las técnicas más novedosas en radioterapia. Además, estarán en línea. Y todas estas cuestiones conllevarán una mejora tecnológica fundamental, puesto que en la actualidad son muchas las limitaciones que se encuentran en ese sentido. Entre otros procedimientos punteros y muy competitivos con la cirugía, con esta tecnología selectiva se podrá realizar, por ejemplo, una ablación a distancia del tumor sin dañar otras zonas.

Otro de los beneficios que conllevará el hecho de que el Complejo Hospitalario cuente con tres aceleradores lineales será la posibilidad de realizar más tratamientos. En la actualidad, cuentan con dos turnos de mañana y de tarde de los dos aceleradores en activo, por lo que se encuentran en torno a los 20 pacientes por turno y máquina, entre 70 y 80 los que se irradian. Con el tercero aumentarán en un tercio. Y, más allá de la cantidad, la calidad en los tratamientos, que nada tienen que ver con los que se realizaban hace cuarenta o cincuenta años —radioterapia en dos dimensiones, tóxica y con muchos efectos secundarios—.

La llegada de los nuevos equipos también conllevará más personal y formación, puesto que al aparato en sí hay que sumar profesionales que cuenten con la cualificación necesaria para que ese salto cualitativo sea una realidad.