360.000 tercios en solo 10 días

La cerveza El Alcázar se agota en buena parte de los bares, por lo que Heineken adelanta la segunda edición

16 mar 2019 / 11:10 H.

La cerveza El Alcázar triunfa. De hecho, salvo que haya alguna “escondida” por una nevera o en la despensa de algún bar o restaurante, actualmente resulta imposible encontrarla. Los jiennenses se han bebido 360.000 tercios de esta cerveza desde que se comenzó a comercializar, el pasado 5 de marzo, hasta ahora. Sin duda, una tremenda sorpresa por la enorme aceptación del producto. Solo hay que salir a la calle y preguntar. Prácticamente, todos la han probado y dan alguna opinión sobre su vuelta. Heineken España informa de que la primera edición contó con 30.000 cajas de cerveza de 12 botellas de 33 centilitros. Pues, ya no queda ni una.

De ahí que la empresa cervecera haya tenido que poner en marcha —mucho antes de lo que esperaba— una segunda edición. A la red de distribución no le queda una sola caja. De ahí que los maestros cerveceros trabajen para llevarla al bar cuanto antes..

Sorpresa. “Estamos muy emocionados de recuperar una marca tan querida como El Alcázar. También muy agradecidos por la espectacular acogida que está teniendo esta cerveza, que ha superado nuestras expectativas, de forma que la totalidad de la primera producción ya está en el mercado. La elaboración de esta cerveza la realizamos con mucho mimo y cariño en pequeñas cantidades en nuestra fábrica de La Imora, y gracias a que nuestros maestros cerveceros tenían adelantada una segunda producción, vamos a poder sacarla al mercado en los próximos días para que los amantes de El Alcázar puedan seguir disfrutando de esta cerveza”, ha manifestado Sagrario Sáez, responsable de Innovación de Heineken España.

El Alcázar se elaborará en la misma fábrica de Jaén que la vio nacer, en La Imora, reinventándose con maestría para ofrecer una cerveza de máxima calidad. Inspirada en la receta original, la nueva cerveza El Alcázar tiene cuerpo, sabor intenso y fuertes notas aromáticas, con 6 grados.

La nueva botella recupera el color verde original de 1928, el año de su fundación y por supuesto, el icónico Castillo de Santa Catalina, emblema de la marca desde su origen. Una propuesta local de calidad, elaborada en nuestra fábrica de Jaén.

Realmente, la aceptación de este producto ha sido impresionante en el mercado. Era difícil acudir a un bar y no ver a alguien con El Alcázar en la mano. No hay duda de que constituye un auténtico emblema para la provincia jiennense. De hecho, durante el tiempo que se dejó de fabricar, en el que muchos pensaban que había desaparecido, su logotipo se mostró como una imagen más de marca y orgullo de la provincia jiennense. Ahora, una vez que ha salido al mercado, queda claro que los jiennenses realmente la querían. Beberse 360.000 tercios en 10 días, no es sencillo ni aún para una cerveza.