Una comisión pública para investigar

Theresa May, sobre el incendio, “a gente merece respuestas, la investigación se las dará”

16 jun 2017 / 11:48 H.

La primera ministra británica, Theresa May, ordenó ayer una investigación pública completa del incendio que arrasó el miércoles por la noche la torre Grenfell de Londres, cobrándose la vida de al menos 17 personas. “Ahora mismo, la gente quiere respuestas y es absolutamente correcto y por eso hoy estoy ordenando una investigación pública completa de este desastre”, ha declarado May. “Tenemos que saber qué ocurrió, tenemos que tener una explicación de esto”, añadió. “La gente merece respuestas, la investigación se las dará”, recalcó. La primera ministra realizó por la mañana una breve visita al lugar de la tragedia, donde se ha reunido con los bomberos y los equipos de emergencia. Hasta el lugar también se ha desplazado el líder de la oposición, el laborista Jeremy Corbyn, quien ha reclamado que “debe salir a la luz la verdad” y se ha reunido con los afectados. “Lamentablemente puedo confirmar que el número de personas que han muerto es actualmente de 17”, declaró el comandante de la Policía de Londres, Stuart Cundy, que precisó que hay “37 personas que siguen recibiendo tratamiento en el hospital, de las 17 están en cuidados intensivos”. En declaraciones a la prensa, Cundy explicó que la operación de búsqueda llevará tiempo y ha dejado claro que por ahora nada invita a pensar que el incendio pueda estar relacionado con terrorismo. Tampoco ha querido pronunciarse sobre si las labores de remodelación del edificio de apartamentos de 24 plantas tuvo algo que ver con el siniestro. Por su parte, la comisionada del Departamento de Bomberos de Londres, Dany Cotton, explicó en declaraciones a Sky News que ya no se espera encontrar a nadie con vida. “La gravedad y el calor del fuego significan que sería un absoluto milagro que alguien hubiera quedado con vida”, resaltó, asegurando que muchos bomberos están “devastados” por lo que han visto, incluido personas saltando por las ventanas o lanzando a sus hijos para alejarlos de las llamas.