Masacre en una escuela de Pakistán

El movimiento talibán paquistaní (Tehrik-e-Taliban, TTP) perpetró ayer uno de los mayores ataques de los últimos meses al acabar con la vida de más de 130 personas en un asalto a la Escuela Pública del Ejército en la ciudad de Peshawar, en el noroeste de Pakistán.

17 dic 2014 / 10:43 H.

Un reducido grupo de milicianos talibán accedió a primera hora de la mañana a esta escuela vinculada con las Fuerzas Armadas paquistaníes tras disparar contra el personal que controlaba al acceso al recinto. Las imágenes de televisión difundidas por Internet muestran a los milicianos a bordo de una furgoneta y cómo uno de ellos, tras realizar varios disparos, abre la barrera para entrar en el centro.

Durante las primeras horas del asalto, las informaciones sobre el número de muertos variaron desde los primeros balances con unos pocos fallecidos y heridos hasta que el recuento comenzó a aumentar por decenas las víctimas y, finalmente, superó el centenar de fallecidos.

En esas primeras horas tras el inicio del asalto, un portavoz de los talibán paquistaníes, Muhamad Umar Jorasani, reivindicó el ataque y aseguró que los milicianos tenían orden de no herir a los niños. Horas después, justificó que los milicianos mataran a menores de edad con el argumento de que los talibán quieren responder así a los ataques que reciben sus “familias” por parte de las Fuerzas Armadas paquistaníes. “Hemos elegido la escuela del Ejército para el ataque porque el Gobierno está atacando a nuestras familias y mujeres”, afirmó Jorasani, en declaraciones a Reuters. “Queremos que sientan el dolor”, explicó.

La información oficial sobre lo sucedido en el interior de la escuela de Peshawar fue muy limitada y se centró en el recuento de víctimas mortales y heridos y en algunos detalles sobre los avances de los militares de las Fuerzas Especiales encargados de detener a los talibán. Varias fuentes militares explicaron desde el lugar de los hechos que los milicianos entraron en la escuela vestidos con uniformes militares y que en el centro los niños estaban recibiendo una visita de oficiales del Hospital Militar Conjunto.

En concreto, según informó la cadena de televisión local Geo y el diario “Dawn”, los niños asistían a un curso de primeros auxilios impartido por mandos del centro médico castrense, el mismo al que tuvieron que ser trasladados muchos de los estudiantes heridos y muertos en el ataque. El director general de Comunicación de las Fuerzas Armadas paquistaníes, el general Asim Bajwa, informó desde su cuenta oficial de Twitter sobre los avances de los equipos de Fuerzas Especiales desplegados para detener a los milicianos. El alto mando aseguró que los militares paquistaníes lograron matar a nueve terroristas y desalojaron los cuatro edificios que componen la Escuela Pública del Ejército. El ataque provocó la condena por parte del primer ministro paquistaní, Nawaz Sharif, y de mandatarios de países vecinos como el presidente afgano, Ashraf Ghani, y el primer ministro indio, Narendra Modi.

Sharif se desplazó ayer a Peshawar para supervisar las operaciones contra los milicianos islamistas y quiso aclarar ante la prensa que la lucha contra el terrorismo no terminará hasta que Pakistán acabe con todos los terroristas.