Fillon, imputado por presunto desvío de fondos públicos

El ex primer ministro francés François Fillon, candidato de Los Republicanos a la Presidencia, fue imputado formalmente por los delitos de desvío de fondos públicos y apropiación indebida, en relación con los supuestos empleos ficticios de su mujer como asistente parlamentaria. Fillon fue citado ante el juez hoy, pero la imputación finalmente se formalizó ayer por la mañana, según avanzaron varios medios, entre ellos la revista “Le Canard Enchaîné”, que destapó el escándalo. La Fiscalía también confirmó este extremo. Durante la comparecencia,el candidato presidencial rehusó responder a las preguntas de los jueces y, en cambio, optó por leer una declaración, informa “Le Figaro’”: “El empleo de mi esposa como colaboradora parlamentaria no era ficticio y no compete a la autoridad judicial realizar una apreciación sobre la calidad o la cantidad de este trabajo”, esgrime. Según las informaciones publicadas, Penelope Fillon se embolsó cientos de miles de euros gracias a un trabajo como ayudante de su marido que, en realidad, no ejercía. El matrimonio negó cualquier irregularidad y tan solo concedió unos mínimos matices éticos a la polémica contratación. Fillon insistió calificando de “innegable” la labor realizada por su mujer y lamentó que no se tuvieran en cuenta los documentos facilitados por sus abogados. Asimismo, considera “precipitada” la citación y advierte de que, aunque no quiere “favores”, exige “imparcialidad” institucional y que se “respete la ley”. Fillon reiteró argumentos ya conocidos aunque suavizó los términos, ya que en un discurso público llegó a denunciar un “asesinato político” en su contra y acusó a las autoridades de actuar movidos por intereses electoralistas, lo que fue incluso respondido por el Elíseo. El caso perjudicó la imagen del ex primer ministro y sus aspiraciones de cara a las elecciones presidenciales de abril y mayo, para las que pasó de favorito a quedar virtualmente fuera de la segunda vuelta. Le superan ahora la ultraderechista Marine Le Pen y el centrista Emmanuel Macron, que evitaron valorar la imputación de su rival. Los Republicanos respaldaron públicamente la candidatura de Fillon después de semanas de idas y venidas en torno a cuál debería ser su futuro. Numerosas voces del centro-derecha llegaron a reclamar la presentación de una candidatura alternativa, algo que ahora se presenta inviable.