Una voraz banda asalta cinco cortijadas en Aldeaquemada
José Luis tenía su cortijo listo para celebrar la despedida de soltera de su hija. En la casa, cerca del río Guarrizas en Aldeaquemada, se iba a juntar con su gente para festejar la víspera de la boda. Le robaron la bebida, le dieron el rato. No fue la única casa asaltada en el municipio aldeano en la madrugada del 24 al 25 de abril, día de San Marcos. En esa jornada, fueron desvalijados otros cuatro inmuebles, según recuerda el alcalde, Manuel Fernández Vela. Los delitos en el pueblo de Sierra Morena, con 540 almas censadas, no se daban desde hace años. “Ya los han cogido”, explicó, ayer, con alivio, el regidor.
¿Quiénes son los sospechosos? La Guardia Civil, en el marco de la operación Mejillones, informó de dieciséis detenciones. Son ciudadanos rumanos a los que la Benemérita echó el guante en Coslada, Fuenlabrada y El Molar, todos municipios de Madrid. Fuentes de la Policía Judicial de Soria, Comandancia del Cuerpo encargada de esta intervención, precisó que se les atribuyen 90 robos, cometidos en tierras sorianas; Ciudad Real, Toledo y Jaén. En la provincia jiennense, además de entrar en cinco inmuebles de Aldeaquemada, al parecer, también dieron golpes, el pasado 9 de mayo, en Castellar, de donde birlaron un rifle, y Santisteban del Puerto, donde lograron hacerse con un vehículo.
El “método de trabajo” de la banda era llamativo, a tenor de lo averiguado por el Instituto Armado. Antes de delinquir, hacían un reconocimiento exhaustivo de la zona. Hasta allí nunca llegaban en sus coches, sino que preferían recorrer a pie distancias de hasta 15 kilómetros. Una vez obtenido el botín, usaban para cargarlo un coche que siempre robaban, finalidad que, supuestamente, tuvo el auto sustraído en el municipio santistebeño. De esta forma, pretendían no ser detectados. Este hecho aclara el porqué de los variopintos objetos recuperados por la Benemérita. El inventario incluye desde bebida espirituosa a una piel de cocodrilo disecada, mesas plegables de contrachapado; máquinas y herramientas de distinto tipo, lienzos, televisores y escopetas y otras armas de fuego o carabinas de aire comprimido, habituales en las cortijadas.
El valor total de lo intervenido en la operación, a lo que hay que sumar tres coches, ronda los seiscientos mil euros, como precisa el comunicado de la Guardia Civil. La recuperación de un vehículo “sospechoso” en Alcubilla de Avellaneda, provincia de Soria, donde se registraron cinco robos, proporcionó la primera pista al Cuerpo. Los primeros dos miembros de esta red fueron arrestados en El Molar, cuando regresaban de robar, según el Instituto Armado.
Los frecuentes robos en el campo obligaron, en septiembre, a la creación de un grupo específico, llamado ROCA, para perseguir estos hechos. Desde entonces, el número de detenciones supera las mil quinientas en toda España.