Robo "raro" en Ermita Nueva con un botín de 3.800 euros
Antonio Extremera Arjona, el dueño de una construcción situada en el paraje Llano de Azores o Las Monjas, en Ermita Nueva, ha denunciado el robo sufrido en su inmueble. Según sus cálculos, el valor de los bienes sustraídos ronda los 3.800 euros. El hombre, que reside habitualmente en Granada, está sorprendido por el “extraño formato” de lo ocurrido. Detalla que los ladrones hicieron a pie los 400 metros que separan la N-432 de la vivienda. Forzaron el candado de la cadena exterior y una vez en la casa, rompieron la cerradura de la cochera. Como explica Extremera, se dedicaron a examinar de manera muy minuciosa y sistemática todos los rincones y las cajas. Después esparcieron por el suelo todas las pertenencias, incluido el contenido del frigorífico.
“Estamos muy preocupados porque el ‘modus operandi’ no es el típico de unos chatarreros y parece que buscaban dinero”, remarca el perjudicado. Entre los artículos que le quitaron habían una bomba de agua, dos juegos de llaves en un atractivo estuche, una radial, un compresor para picar hormigón y un grupo de soldar. Además, aprovecharon para extraer alrededor de 140 litros de gasóleo procedente de un tractor y de un camión. En cambio, no se llevaron una moto, reglas, herramientas y otro compresor.
huida. Uno de los aspectos que más desconcierta a Antonio Extremera es el hecho de que los ladrones usaran el turismo Fiat que tiene en el garaje para huir y cometer, al parecer, otros robos. Al final dejaron el vehículo junto a la entrada de la finca, muy cerca de donde aparecieron un motor eléctrico muy similar al que le arrebataron a él, un fregadero y unos tubos. Todavía no está claro de dónde sustrajeron estos efectos.
Lo que sí parece nítido es que con el automóvil, al que él mismo le había dejado las llaves puestas, hizo varios kilómetros y avanzó por caminos, como evidencia el polvo que cubría el utilitario. Por otro lado, en su intento de llenar el habitáculo con los objetos robados en su casa habían causado desperfectos en el interior del coche, al que asimismo le quedó la huella de un golpe en la trasera.