Perros que mejoran la vida

El empleo de perros para llevar a cabo terapias asistidas con animales puede suponer numerosos beneficios tanto psicológicos como físicos para diversos pacientes. Una terapia “alternativa” que fue el asunto central de la charla impartida por el catedrático de la Universidad de Sevilla y director de la Sociedad para la Investigación Psiquiátrica y psicológica, Alfonso Blanco Picabia. Una actividad enmarcada dentro de la programación de la asociación Alzheimer 21 de septiembre de Úbeda, con motivo del día mundial de esta enfermedad. “Esta conferencia demuestra que los perros no son solo una obligación o carga, sino que puede ayudar a nuestra salud o calidad de vida”, dijo la edil de Servicios Sociales, Natalia Pérez.

17 sep 2015 / 09:53 H.


Las terapias con animales, explicó Alfonso Blanco, llevan más de medio siglo utilizándose en diferentes lugares del mundo en niños, ancianos o enfermos físicos, sin embargo en nuestro país hasta hace poco no se le ha comenzado a prestar “atención”. En este sentido, explicó que en la Universidad de Sevilla se comenzó a impartir un máster oficial, y por consiguiente, a aumentar la demanda de este tipo de servicios que desde la universidad no se podían cubrir. “Por este motivo, se creó una fundación de ayuda y terapia asistida por perros”, afirmó. Durante la charla, expuso que este tipo de terapias fomentan, además de la estimulación cognitiva, las funciones motoras, ya que ayuda al paciente a mantener la atención para hacer cosas con las manos, pasear o relacionarse con otras personas. “El perro no cura, pero es un instrumento para conseguir unos fines que marca el terapeuta o el profesional responsable del paciente”, explicó el responsable de la conferencia.
No obstante, este tipo de terapias se encuentran “de frente” con ciertos problemas marcados por la legislación. “Muchos establecimientos o servicios públicos no aceptan la entrada de animales, ya que la normativa va un paso por detrás de los profesionales”, expuso. Debido a esto, es importante que haya una “sensibilización de cara a la sociedad”. “España se encuentra en ciertas terapias y leyes 30 años por detrás. No se concibe que los perros no puedan entrar en playas, restaurantes o algunos organismos públicos”, dijo.
Los perros más utilizados suelen ser de refugio. “Hay razas que son muy bonitas, sin embargo no buscamos la estética, sino que lo que nos interesa es que busquen recompensa de cariño, que tomen el trabajo como un juego, y no como una obligación penosa, ya que es cuando realmente el paciente se beneficia y la sociedad se ve mejorada”, explicó el ponente Alfonso Blanco.