Huesa se moviliza por un niño de cuatro años enfermo

Javier nació el 17 de febrero de 2011 y desde que llegó al mundo su vida no ha sido nada fácil.

01 abr 2015 / 15:16 H.

Tiene reconocida un grado de discapacidad del 99 por ciento tanto física como sensorial y psíquica. Su diagnóstico es retraso madurativo, parálisis cerebral mixta e hipoacusia severa. Su historia conmovió a un grupo de voluntarios de Huesa, que el próximo 19 de abril celebrarán una jornada lúdica festiva para recaudar dinero y ayudar a esta familia de Linares a pagar los diferentes tratamientos.
A los cuatro meses, Javier y sus padres comenzaron la andadura para lograr un diagnóstico concreto y, en consecuencia, un tratamiento que permitiera mejorar su calidad de vida. Tiene consultas y revisiones periódicas en Neuropediatría, Enfermedades Metabólicas, Oftalmología, Otorrinolaringología, Aparato Locomotor, Neumólogo y Cardiólogo, entre otros.  Es una vida para nada acorde con su edad y que conmueve a todo aquel que lo conoce.
En mayo de 2012, el Servicio de Neurología Pedriátrica del Complejo Hospitalario de Córdoba lo derivó para realizarle una biopsia muscular, en la que se apreciaron deficiencias en la actividad enzimática de la cadena respiratoria mitocondrial, un nuevo problema. Sin embargo, Javier y su familia intentan, en la medida de lo posible, conseguir la mayor integración. Desde bien pequeño fue a la guardería y, ahora, estudia en el centro específico Virgen de Linarejos. Su día a día se ve alterado con sesiones de fisioterapia, logopedia, psicología y actividades con la asociación Aprompsi. Además, dos veces en semana acude al Hospital San Agustín de Linares para rehabilitación. También se trasladan hasta la capital jiennense para ver al pediatra, además de participar en un programa de hidroterapia. Finalmente, una vez al año, durante cinco días distribuidos en tres semanas consecutivas, recibe una terapia alternativa llamada Therasuit, especialmente indicado para los pacientes que tienen su dolencia. Todas estas terapias, a excepción de la de San Agustín, son de pago, lo que supone un gran desembolsó económico para la familia.
Pueden hacer frente gracias a la prestación por cuidado que reciben a causa de la dependencia de Javier y el dinero que consiguen a través de las campañas de recogida de tapones solidarios que se organizan en Linares y comarca. Ahora, son los vecinos de Huesa los que quieren contribuir a facilitarle la vida y, por eso, realizarán una actividad solidaria el día 19.