08 dic 2015 / 14:48 H.
El clima de la Tierra nunca ha sido estático como ejemplo los períodos glaciares seguido de períodos interglaciares, esta variación global del clima es debido a causas naturales y también a la acción del hombre. Existe una retención del calor del Sol en la atmósfera de la Tierra por parte de una capa de gases “efecto de invernadero” que sin ellos (dióxido de carbono, el óxido nitroso y el metano) la vida tal como la conocemos no sería posible, ya que el planeta sería demasiado frío. Hasta ahora bien pero ¿qué está pasando? La temperatura ha aumentado aproximadamente 0,6°C en el siglo XX, el nivel del mar ha crecido de 10 a 12 centímetros por la expansión de océanos, cada vez más calientes. España, por su situación geográfica y sus características socioeconómicas, es un país altamente vulnerable a los impactos del cambio climático. En concreto, la agricultura y ganadería contribuye al cambio climático y se ve afectada por él, es responsable de emisiones totales de gases de efecto invernadero que hay que reducir y adaptar el sistema de producción alimentaria, ser más eficientes en el aprovechamiento de los recursos, prácticas agrarias más eficientes como picar nuestra poda, etcétera. Y también se ve y verá seriamente perjudicada la agricultura y ganadería por este cambio, sequías, inundaciones, extinción de animales y plantas, cambios en los cultivos por el avance de sus estados fenológicos, como la floración del olivo entre otros. Se está celebrando la Cumbre del Clima en París, con 195 países discutiendo un protocolo que sustituya al de Kioto para aplicar a partir de 2020. La intención es llevar a cabo políticas de mitigación de emisiones y de adaptación y que al final de siglo, la temperatura global no supere un incremento de 2°C.
Los esfuerzos presentados parecen no ser suficientes y es vital llegar a un compromiso. Estamos ante un fenómeno que podemos asemejar al movimiento pendular con oscilaciones cada vez más amplias. El cambio climático no es un fenómeno sólo ambiental sino de profundas consecuencias económicas y sociales y aún podemos poner freno a las terribles manifestaciones y que ya las estamos sufriendo.