una emotiva jubilación
El secretario judicial, José Ramón Rubia, lo celebra con sus amigos
“Jubilación” es un sustantivo que lleva inmerso la palabra “júbilo”, un nuevo tiempo para disfrutar y hacer todas esas cosas que antes, por causa del trabajo, no se tenían tiempo de realizar. Así lo piensa el letrado de la Administración Judicial —cargo anteriormente conocido como secretario judicial— José Ramón Rubia que, a sus 61 años, se despide de su etapa laboral rodeado de compañeros, amigos y algunos familiares.
El Hotel Condestable de Jaén fue testigo de este emotivo encuentro. Allí, más de 70 personas celebraron un almuerzo que vino cargado de regalos y homenajes. Rubia estuvo más de 35 años de servicio y pasó por juzgados distritos como el de Andújar, Jaén y Martos, de donde es natural.
“Aprobé las oposiciones en 1982 y mi primer destino fue Lucena. En este día recuerdo a mi padre, Francisco Rubia, que falleció hace dos años. Ahora, dedicaré mi tiempo al tenis. Mi afición es ser árbitro nacional y pediré torneos en España y en el extranjero”, reconoce Rubias. Junto a él estuvieron magistrados como María del Mar Rebolloso, Miguel Sánchez y Manuel Otero, además del fiscal jefe, Carlos Rueda, y el secretario de coordinación judicial, Juan Ramón Gómez.