“Fuiste una persona honesta, honrada y leal”

Mi padre era una persona honesta, honrada y leal. Esto es lo primero que me dice la gente que le conocía y que se ha enterado que ya no está con nosotros. Lo que es para mí un orgullo que así lo definan. Tenía mucho carácter y una fuerte personalidad y, a lo largo de su vida, así lo ha demostrado, con sus errores y equivocaciones, como todo el mundo cometemos, siendo consciente de las decisiones que tomaba, hasta el último momento y asumiendo las consecuencias de las mismas.

A los que hemos compartido la vida con él nos transmitió que si queríamos conseguir algo en la vida, debíamos intentarlo con estudio, esfuerzo y constancia. Y él se lo aplicaba totalmente.

Con su familia, después de 50 años casado con mi madre, lo que he visto era estar pendiente de ella y de su enfermedad, hasta el último día. Como padre, su prioridad era que nos esforzásemos en estudiar, debiendo buscar el trabajo que más nos gustase y disfrutar con él.

Su lema era: “Dejar vivir a cada hijo a su manera sin meterse en sus vidas”. Quería enormemente a todos sus nietos, a los que están aquí y a los de Burgos. Con los que están fuera, le encantaba que vinieran a visitarlo, contándole sus historias y escuchando lo que ellos le contaban, y disfrutaba a lo grande viendo un partido de fútbol con sus cuatro nietos que viven en Jaén. Era muy familiar, muy amigo de sus amigos y muy independiente, por lo que el final de su enfermedad lo llevó muy mal al depender de los demás y ver que teníamos que dejar nuestras casas para atenderle.

Espero que después de tanto sufrir, por fin estés descansando, como pedías los últimos días.