“Carta al cielo para una princesa”

Nazareth soñaba que un día podría tocar la luna”. ¡¡Nazareth, hoy tus compis de Pídeme la luna, te hemos estado buscando!! Te hemos llamado y no contestabas... ¿Será que ya no estás? —Pero tenías que estar ahí, en Disneyland, hemos preparado este fascinante viaje también para ti, tenías que estar ahí con todos los niños de Pídeme la Luna, acariciando la ilusión y la magia y sonriendo por cada rincón de ese maravilloso mundo, lleno de fantasía, escenario de color y repleto de sueños cumplidos. —¿Que tienes algo que contarnos?¿Qué nos quieres contar, Nazareth? —¿Ah, que tú has elegido otro bonito viaje? ¿Que miremos hacia el cielo azul, y allá donde el sol hace brillar con más fuerza el arcoíris, allí estás tú princesa? ¿Que has alcanzado la Luna? Que allí ya no hay dolor, ni agujas, ni sueros, ni llantos.. Que allí, hay solo susurros y amor... —¡¡Qué bonito todo lo que nos cuentas Nazareth!! —Que juegas con las estrellas que más brillan y la luna te cuenta cuentos y te canta bonitas canciones... —¡¡Qué bien suena Nazareth ..!! Seguro que tú eres la estrella que más brilla entre todas ellas !! La más bonita del firmamento!! —¿Que hay plumitas blancas muy suaves que te acarician y te hacen cosquillitas? Y que estás segura de que no te vas a poner triste nunca más. Que no suframos por ti, que estás muy feliz y que Dios te cuidará Eternamente... — Dios te ha elegido pequeña.! Qué felices nos hace, escucharte tan feliz! Nos consuela un poquito escuchar todo lo que nos cuentas Nazareth, pero te vamos a echar mucho de menos, sobre todo, tu sonrisa, una sonrisa enternecedora que no olvidaremos jamás. “Buen viaje, muñequita”.