Surcar las aguas del paraíso

El barco solar y el centro de El Tranco diversifican la oferta turística de la provincia

31 jul 2016 / 11:21 H.

Navegar en plena naturaleza ha dejado de ser una quimera en el interior de Andalucía. El barco solar de El Tranco es el último gran atractivo turístico del Parque Natural de las Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas. En el corazón del pulmón verde en el que nace el río Guadalquivir, su inmensidad se hace mar. Desde hace unos días, sus visitantes pueden surcar las aguas en calma en una experiencia única para descubrir rincones desconocidos del mayor espacio protegido de España.

La Diputación de Jaén y la Junta de Andalucía, dentro del marco del convenio para el aprovechamiento turístico-deportivo de los pantanos de la provincia hacen realidad el Centro Turístico y Recreativo y del Embalse del Tranco, un complejo dotado de servicios de hostelería y restauración, con zonas de juegos infantiles y espacios para emprender una aventura en contacto directo con la naturaleza. Senderismo por el paseo de rapaces, tirolina o rocódromo son solo algunas de las alternativas ofrecidas fuera del agua. Para el medio acuático, aparte del barco recreativo —con capacidad para sesenta pasajeros y autoabastecido con energía solar—, existe la opción de descubrir El Tranco en piragua, “padle surf” o, incluso, a bordo de un barco de vela.

La secretaria general para el Turismo de la Consejería de Cultura, Turismo y Deporte, Susana Ibáñez, tuvo la oportunidad de conocer el barco y el centro de El Tranco junto con el presidente de la Diputación, Francisco Reyes; el diputado de Promoción y Turismo, Manuel Fernández; la delegada del Gobierno, Ana Cobo; la de Turismo, Pilar Salazar, entre otros responsables públicos. Todos los presentes se mostraron satisfechos con el proyecto, que permite incrementar el tirón de una de las áreas más visitadas del territorio jiennense y de toda la comunidad autónoma de Andalucía. Francisco Reyes destacó, con orgullo: “Jaén era una provincia de paso. El turista venía rápido y se iba. Ahora estamos en 2,8 pernoctaciones por visitante, por lo que hemos sido capaces de multiplicarlas, pero tenemos que seguir buscando argumentos para que la gente se quede aquí, y este centro y este barco son claro ejemplo de ello”.

La construcción del centro turístico supone una inversión en obra de más de 2 millones, a los que se suma la adquisición de la propia embarcación, por un importe de 275.800 euros. Con el nuevo atractivo, el parque natural complementa su riqueza para deleitar a sus visitantes con cautivadoras propuestas deportivas, culturales y de aventura.

En los últimos años, el Plan de Dinamización del Producto Turítico del Parque Natural de las Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas ha supuesto una importante mejora y actualización de los equipamientos. Entre otras intervenciones se ha completado un plan de señalización en parajes y miradores, carreteras y cascos urbanos, se ha trabajado en la formación empresarial y en la promoción y se han añadido alternativas pensadas para diferentes perfiles de visitantes. Entre ellas sobresalen el Gran Sendero GR247-Bosques del Sur, el Centro de Interpretación de la Cultura de la Madera de Vadillo Castril y, en el término de Quesada, el Museo Miguel Hernández- Josefina Manresa.

Con 478 kilómetros de longitud, divididos en 21 etapas principales y 3 variantes, el GR247-Bosques del Sur contemla un trazado circular que permite conocer a pie o en bicicleta los principales atractivos del parque natural. De hecho, en el itinerario, los pasos del caminante se cruzan con los de ciervos, gamos, cabras monteses, muflones y jabalíes, escrutados desde el cielo por el águila real, el buitre leonado e incluso el quebrantahuesos.

Junto con la cada vez más demandada oferta de turismo activo y de aventura, el parque natural ha sumado a sus alicientes medioambientales una rica y variada oferta cultural. A citas como “Bluescazorla”, el “Festival Internacional del Aire-El Yelmo” o el de “Teatro de Cazorla”, el Museo Miguel Hérnandez-Josefina Manresa exhibe buena parte del legado del poeta, adquirido por la Diputación y que comparte recinto con la obra de Rafael Zabaleta, uno de los grandes pintores del siglo XX. En cuanto al centro de interpretación de Vadillo Castril, es otro de los nuevos equipamientos, diseñado como referente para los visitantes de la zona sur del parque. Se ubica en el mismo lugar en el que estuvo la instalación del aserradero. Desde la orilla se botaron las “trozas” y, más tarde, traviesas para las vías del tren de toda España. El espacio rescata la memoria de la memoria cultura forestal de los habitantes de la sierra.