“Está surgiendo una ideología que no va hacia un futuro de progreso”

17 ene 2017 / 11:56 H.

Tras una vida profesional dedicada a la enseñanza —primero, como maestra de infantil y, más tarde, como asesora en el Centro de Profesorado, del que se jubiló como directora en 2013—, Carmen Rueda Parras (Pegalajar, 1949) encadenó la jubilación con la presidencia de la Liga Giennense de Educación y Cultura Popular. “Empecé cuando se fundó, en el año 2000, pero, por motivos familiares, tuve que desligarme de las ocupaciones más activas y, al jubilarme, parece que me estaban esperando. Me propusieron que me presentara como presidenta y, como mi intención era participar como voluntaria en una ONG, aunque no con un cargo de responsabilidad así, acepté”.

Federada a la Liga Española de la Educación, la Giennense se nutre de fondos públicos —de la Junta y de la Diputación, fundamentalmente— para desarrollar programas de trabajo con la infancia, la juventud en riesgo de exclusión y los migrantes, y de cooperación internacional. “Damos apoyo a los centros que nos requieren para actividades de refuerzo, la organización de campamentos urbanos y actividades de ocio y tiempo libre. Y todo con personas voluntarias”, señala Rueda, que destaca la labor de la “Escuela de Familia”. “Como docente, me parecía fundamental trabajar con las familias para que se implicaran en una educación de calidad”, apunta esta maestra, historiadora, investigadora y miembro del Seminario Mujer, Ciencia y Sociedad de la Universidad de Jaén, que, con orgullo, se declara feminista y subraya que uno de los objetivos que la han movido siempre ha sido el compromiso con igualdad de género. Probablemente, por eso, cuando se le pregunta cómo ve la sociedad actual habla, sin vacilar, de “involución”. “Durante unos años, pareció que la conquista de derechos sociales y educativos iba a ser muy fácil, pero empezó la crisis y ha habido una vuelta atrás en un monton de derechos. Está surgiendo una nueva ideología que no va hacia un futuro de progreso y mente abierta. Estamos en retroceso y hay valores que creíamos consolidados, como la igualdad y la solidaridad, por los que hay que seguir luchando”. De ahí —resalta— la importancia de la educación. Pero no solo como instrucción. Para Carmen Rueda, deben sumarse la familia y la sociedad. Y, con ella, los medios de educación, para formar entre todos ciudadanos con sentido crítico.