Fuensanta, la tradición viva de una Semana Santa diferente

Fuensanta de Martos es un pequeño municipio que se sitúa en la Sierra Sur. Como es algo característico en una provincia conocida como “el mar de olivos”, su actividad es, en su mayoría, agrícola, concretamente, dedicada al cultivo del olivar. Es por eso que toman gran protagonismo las almazaras y el aceite que se elabora en esta zona y que también constituyen uno de los principales motores económicos.

Su localización ha marcado siempre su papel de núcleo de población y eso conlleva a que tenga una gran historia y que queden algunos recintos fortificados que corresponden a diferentes periodos. Entre su patrimonio cultural e histórico, destaca la Iglesia de Nuestra Señora de la Fuensanta, cuyo origen data del siglo XVI, consta de una sola planta dividida en tres naves. Precisamente, es su patrona la Virgen de la Fuensanta y a ella le dedican las fiestas más importantes del municipio, que son un referente comarcal y que no solo se centran en los aspectos religiosos, sino también en actividades culturales, deportivas y festivas para que todos los asistentes disfruten de unos días de convivencia, diversión y unión.

Fuensanta de Martos se caracteriza por ser un pueblo en el que la amabilidad y la simpatía de sus habitantes se queda en el corazón de todos aquellos que lo visitan. Entre las diferentes actividades que se desarrollan en el municipio, una de las más destacadas en la Semana Santa, en la que se realiza una representación en vivo de la pasión y muerte de Cristo. Toda una tradición que, este año, cumple su 44 aniversario y que para el pueblo es todo un orgullo. Durante unas horas, todos los asistentes y participantes se desplazan en el tiempo para convertirse en el escenario de la Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo. Cada año, miles de personas se reúnen para vivir, en primera persona, en los lugares más emblemáticos del municipio como, por ejemplo, el parque o la Fuente de la Negra.