La población cae por tercer año consecutivo

Jaén pierde un 0’7% de sus habitantes empadronados

    21 ene 2016 / 19:22 H.

    Un año más, la población en España continúa su descenso. 2014 se convierte en el tercer ejercicio consecutivo en el que España pierde habitantes, sobre todo a causa de la reducción de población extranjera. El padrón continuo elaborado por el Instituto Nacional de Estadística (INE) a cierre del año muestra que España perdió un 0,31% de población en 2014. Si un año antes, el país acogía a 46,77 millones de personas, a 1 de enero de 2015 solo se registraban 46,62 millones. Jaén es una de las provincias que más población pierde, con una reducción de empadronados del 0,7% y un registro de 654.170 habitantes a 1 de enero de 2015.

    El año pasado se redujo el número total de habitantes en 146.959. Sin embargo, mientras se produjo un incremento en el registro de españoles inscritos, se produjo un descenso de la población foránea, que se redujo en 293.843 personas. La población empadronada en el conjunto de España, a 1 de enero de 2015 es de 46.624.382 habitantes, por lo que la reducción poblacional es de un 0,3%. Las únicas provincias españolas en las que creció la población empadronada en 2014 fueron Álava y Guipúzcoa, en País Vasco; Huelva y Málaga, en Andalucía; Murcia; Las Palmas y Santa Cruz de Tenerife, en las Islas Canarias, y la ciudad autónoma de Melilla. Por su parte, la pobración decreció con más profusión en la zona centro de la península, sobre todo en Cuenca, en Castilla-La Mancha; Soria y Ávila, en Castilla-León, y Orense, en Galicia.

    A fecha 1 de enero de 2015 había en España 4.729.644 habitantes extranjeros, de los que la mayoría, casi la mitad, proceden de países europeos, principalmente de la Unión Europea. Por países, Rumanía (672.634) y Marruecos (604.907) son los estados de origen de la mayoría de los extranjeros, seguidos bastante más de lejos por Ecuador (163.792) y China (155.742). El balance entre inmigración y emigración ha dado lugar a un balance migratorio negativo, lo que, sumado al aumento de las defunciones y el descenso de los nacimientos, permiten explicar esta reducción en el padrón continuo español por tercer año consecutivo.