El Gobierno “tiende la mano” a los independientes

Méndez de Vigo sobre la cumbre: “Los ciudadanos verán quién quiere diálogo y quién la unilateralidad”

10 dic 2016 / 11:41 H.

El portavoz del Gobierno, Íñigo Méndez de Vigo, considera que la convocatoria del Pacto Nacional por el Derecho a decidir por parte del presidente catalán, Carles Puigdemont, es un “síntoma de unilateralidad” y confía en que “los catalanes y el resto de españoles” se darán cuenta de “los que están por el diálogo y los que lo hacen en la parcialidad.

En una rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Méndez de Vigo calificó la reunión como “una exigencia de los radicales de la CUP” para aprobar los Presupuestos catalanes, e insistió en que, frente a eso, el Gobierno central piensa practicar una política de “mano tendida”.

El portavoz del Gobierno no se salió de ese mensaje de oferta de diálogo y disposición al acuerdo sobre “un amplio campo” de cuestiones que se pueden debatir, desde los Presupuestos del Estado a la financiación pasando por las inversiones y los recursos en los tribunales. “Nosotros estamos en el diálogo y otros están en la unilateralidad”, insistió.

Dicho esto, también aclaró el hecho de que ya existen contactos y negociaciones con las formaciones catalanas sobre diversos asuntos, aunque no se anuncien encuentros de alto nivel. De momento, no se ha fijado una reunión ni entre los presidentes ni entre los vicepresidentes de ambos gobiernos y fuentes de La Moncloa alejaron la posibilidad de que puedan celebrarse antes de fin de año.

Estas mismas fuentes explican, sin embargo, que el Gobierno no retirará la mano tendida y que serán otros los que tengan que explicar que no la toman, si es que finalmente no lo hacen. Advierten también de que los conflictos no se solucionan en unas semanas y que llevará su tiempo tratar de reconducir la relación con la Generalitat. En este contexto, la número dos de Rajoy, Soraya Sáenz de Santamaría, informó al Consejo de Ministros de su trabajo sobre Cataluña, una vez que asumió la política territorial, y pidió al resto del gabinete que también “intensifique el diálogo y la cooperación” con los partidos catalanes. “Para saber qué cosas podemos hacer juntos”, concretó en ese sentido Iñigo Méndez de Vigo.

Al mismo tiempo, el presidente del Gobierno mantiene conversaciones con los dirigentes autonómicos para poner fecha y contenido a la Conferencia de Presidentes que quiere convocar en la segunda mitad de enero en el Senado. Desde el Ejecutivo se subrayaron que los asuntos que se debatirán van más allá de la financiación autonómica, la causa por la que inicialmente se iba a reunir este foro. Méndez de Vigo explicó que, además, se hablará sobre asuntos educativos y de sanidad, como la tarjeta sanitaria, y los relativos a las cuentas autonómicas.

Un 59% de vascos es favorable a un referéndum

El 59% de los ciudadanos vascos es favorable a que se celebre un referéndum soberanista en Euskadi, si bien un 39% votaría en contra de la independencia, frente al 31% que votaría que sí. La ciudadanía vasca se muestra dividida en sus preferencias sobre la organización del Estado, aunque un 67% respalda la actual fórmula o un escenario federal, y un 37% de vascos asegura que votaría no en caso de celebrarse un nuevo referéndum constitucional, 10 puntos más que el sí.

Estos son algunos de los datos recogidos en el último Euskobarómetro del equipo dirigido por el profesor de la UPV/EHU Francisco Llera, elaborado en función de 800 entrevistas realizadas entre los días 3 y 27 de octubre. El informe constata que, en el marco de “una división crónica” entre nacionalistas (46%) y no nacionalistas (50%), las diferencias se ajustan en el último año, con un avance de 7 puntos de los primeros y un retroceso correlativo de los segundos de 4 puntos. Tres de cada cinco vascos mantienen la compatibilidad de identidades vasca y española, con un predominio de la dualidad equilibrada vasco-española (36%), a la que se añade el “sesgo” del sentimiento vasquista (22%) que es “muy superior” al españolista (2%).