Una carrera con garra

El piloto villariego, Jesús Torres, recupera su conducción limpia y agresiva, aunque tuvo una caída

18 oct 2016 / 11:42 H.

Jesús Torres, el joven piloto de minivelocidad de Los Villares, volvió a sacar su garra en la penúltima prueba del Campeonato de España que se celebró en el circuito Internacional de Zuera en Aragón, pero una caída en la segunda manga echó por tierra todo su esfuerzo. Torres volvió a ser el piloto de la conducción limpia y agresiva que lo caracteriza y durante la primera manga de carrera bajó los tiempos constantemente hasta conseguir colocarse octavo de entre los 24 pilotos, todos ellos rapidísimos y no daban concesiones.

La segunda manga se desarrolló como la primera, con un Jesús Torres al ataque, exprimiendo a su IMR110 y pilotando al limite, hasta que en la última vuelta y a falta de seis curvas para finalizar, recibía el impacto de uno de sus rivales y sufrió una caída por lo que tuvo que ser evacuado, aunque sin consecuencias en su estado físico. Con la caída dio por finalizada la segunda manga y una carrera en la que luchó, en todo momento, por estar entre los mejores.

No obstante, este fue un buen resultado de Torres si se tiene en cuenta el nivel que actualmente hay en este circuito nacional.

Satisfacción por la carrera y por la evolución del piloto después de algunas pruebas donde la suerte no lo acompañó. Pero los diferentes resultados adversos, lejos de amilanarlo, lo espolean. Con ese ánimo acudió a la penúltima cita con el Nacional de Minivelocidad, cuna de campeones, con la moral alta.

Los entrenamientos libres también le sirvieron para poner su IMR110 a punto y afinar el motor y el resto de los componentes de la moto. Una vez hecho ese trabajo y ya en pista, Jesús Torres empezó a sentirse cómodo y satisfecho del funcionamiento de la moto. Marcó tiempos entre los diez primeros sin apurar al máximo sus posibilidades. Con un circuito sumamente rápido, Jesús Torres llegó a conseguir una velocidad de paso en curva en algunas partes del trazado Internacional de Zuera de 109 kilómetros, que se hacían en pleno apoyo con la moto en curva, llegando en recta hasta los 130 kilómetros de velocidad punta. En definitiva, este fue un resultado positivo a pesar de la caída, que denota la recuperación y el golpe de gas que ha recuperado, volviendo a ser el piloto agresivo y valiente que es. La próxima cita coincidirá con el mundial de motociclismo que se celebra en Cheste.