Un gol de Juan Carlos para volver a ilusionar

No hay mejor forma de olvidar una derrota que con una buena victoria. Y eso, precisamente, fue lo que hizo el Real Jaén en el partido ante el Recreativo de Granada. Un rival digno y de una categoría superior que tuvo sus momentos y puso entre las cuerdas al equipo que lidera Germán Crespo.

Pero los blancos lo tenían claro y querían darlo todo para conseguir ese triunfo que les hiciese recuperarse de la herida que causó la derrota ante el Linares Deportivo en el Trofeo del Olivo. De esta forma, los jiennenses ganaron por resultado de 0-1 gracias a un gol del malagueño Juan Carlos.

La primera parte se caracterizó por una igualdad, en la que ambos equipos lucharon por conseguir el dominio del balón jugada tras jugada y en la que se protagonizaron varios acercamientos, bastante peligrosos, a las porterías, pero ninguna de ellas finalizó. De esta forma, se llegó al paso por vestuarios con el marcador sin estrenar. Los jugadores del cuadro granadino, Isi y Caio realizaron muy buenas jugadas que bien se pudieron convertir en gol, pero De la Calzada no flaqueó ni un segundo y defendió la portería.

En la segunda parte, Crespo dio paso a nuevos jugadores como Juskevicious, Ramón, Migue Montes, Juanca o Juan Carlos. Precisamente, fue este último el que marcó el gol del partido, el que adelantó al Real Jaén en el marcador y el que hizo que los aficionados, que se desplazaron hasta La Ciudad del Deporte para presenciar el partido, saltasen de sus asientos. El malagueño se acercó al portero Hao y, tras una lucha contra él en el área, consiguió colar en esférico en el minuto sesenta y ocho.

Sin embargo, aún quedaba duelo por delante y ambos equipos eran conscientes de ello. Los granadinos, nerviosos por tener al luminoso en contra, realizaron jugadas algo más agresivas, pero ninguna de ellas terminó. Los jiennenses, por su parte, aguantaron la presión y, finalmente, cerraron un resultado que les proclamaba ganadores del partido. Una victoria que supuso un chute de confianza e ilusión, tanto para los jugadores como para la afición, que volvió a ver la calidad del Real Jaén y a soñar con alcanzar el ascenso a Segunda División B.