Última sonrisa en casa antes de jugar el play off

Linarejos se despidió de su equipo pero fue solo un hasta luego. El estadio minero escribió un punto y seguido en la temporada, terminando el segundo plato pero esperando fervientemente al postre. Ese que se sirve a modo de delicatesen como colofón a una cena de gala y que el Linares Deportivo espera llevarse a la boca.

En la última prueba ante los suyos, el Linares venció 1-0 a una UD San Pedro ya descendida pero que consiguió alargar el partido más de lo previsto gracias a su rendimiento defensivo. No fue hasta el minuto 80’ cuando Javi Bolo, tras una gran jugada de Chinchilla, hizo el gol de la victoria. El partido valió a Juan Arsenal para hacer probaturas en su trío atacante, pues juntó por primera vez en el once a Javi Bolo, Álex Rubio y Pedro Beda, con un reparto de tareas muy concreto. Bolo ocupó el puesto de ‘9’ y su labor principal fue la de apoyo para los jugadores de segunda línea; Beda, desde el extremo izquierdo, cumplió el papel habitual de Jorge Barba, siendo ese mediapunta que parte escorado pero que siempre acaba desequilibrando por dentro; y Álex Rubio puso la réplica aportando profundidad y cargando el área desde la derecha. Si bien Pedro ya venía en una buena dinámica de juego, el choque sirvió para ver que sus dos compañeros de ataque están totalmente recuperados para la causa. Rubio se mostró muy participativo y pudo mostrar con frecuencia su gran arma: el desmarque al espacio. Con un Pedro Beda fino en el pase, Rubio disfrutó de muchos balones a espaldas de la defensa. Por su parte, Javi Bolo, más allá del gol, demostró mucha implicación sin balón, siendo el primer adalid de la presión adelantada del equipo.

La primera mitad, bajo el habitual sistema de tres centrales, no resultó demasiado positiva. Tuvo el dominio del balón pero sin demasiado acierto en los metros finales. Tras el descanso Arsenal introdujo variantes que fueron desde el paso a 4-3-3 primero, con Anaba de mediocentro, al 4-4-2 después, tras la entrada de Sales por Pablo Ortiz y la apuesta por Bolo y Chendo como doble ‘9’. Juntando a más gente por delante del balón consiguió el Linares encerrar aún más a su rival y el salto al verde de un inspirado Chinchilla supuso el detonante para asegurar el triunfo. Tres puntos para que el Linares ronde los noventa en total, lo cual habla más que bien del rendimiento de la esta temporada. Próxima estación, Loja. Parada exprés antes del Tourmalet.