Superioridad mancharrealeña sin recompensa en Linarejos

El Linares Deportivo y el Atlético Mancha Real empataron sin goles en el Municipal de Linarejos tras noventa minutos en los que el cuadro visitante fue muy superior al conjunto azulillo pero no consiguió trasladar al marcador el dominio que sí tuvo en el juego.

El equipo de Juan Arsenal volvía a su estadio tras la derrota en Torredonjimeno e inmerso en un bajón importante en su fútbol. El míster contaba con las bajas de Lopito, Josema, Miguelito, Sales y Chendo, y optó por mutar su esquema habitual a un 4-3-3 en el que juntó mucho centrocampista (Rodri, Lara, Pablo Ortiz y Juanfran). La alineación parecía vislumbrar cierta falta de profundidad, pues el grueso del once lo conformaron futbolistas que tienden más a acercarse al balón —asociación— que a alejarse de él —desmarques de ruptura—. Así, el equipo en ningún momento tuvo capacidad para inquietar arriba y exhibió un porcentaje de posesión más bajo de lo habitual y, además, totalmente estéril. Los azulillos no atraviesan su mejor momento pero, aun así, la causa debe hallarse principalmente en el buen hacer de los de Pedro Bolaños. Su equipo dibujó un 4-2-3-1 de bloque medio (ni replegó en su área ni presionó arriba) que supo cortar todas las líneas de pase mineras. El Linares acumuló más pérdidas en salida de pelota que nunca y la consecuencia fue un abuso en el balón largo que evitara sumar errores no forzados. Rodri, la brújula sobre la que gira el juego minero, nunca encontró opciones claras de pase pero su paciencia para sacarla jugada es infinita. Sin embargo, no sucedió lo mismo con los centrales linarenses y la presión de Juanfran (el único manchego que apretaba arriba) fue suficiente para que tanto Rosales como Anaba se excedieran en el balón largo. Un balón largo del que pocas veces saca réditos el Linares Deportivo.

Cada pelota que sobrevolaba el espacio aéreo de Linarejos acababa en un duelo ganado por los futbolistas visitantes y, así, desde el pitido inicial hasta el paso por vestuarios la posesión fue mayoritariamente para el Atlético Mancha Real. Con Quesada en la base de la jugada, Siles abierto en banda para buscar la espalda de Espejo, y Salva y Joaquín generando ventajas entre líneas, los de Bolaños fueron dueños del partido y disfrutaron de suficiente continuidad en sus ataques —si la perdían, eran capaces de recuperarla rápido gracias a su buen hacer sin pelota—. Solo la falta de mordiente ofensiva les privó de meter miedo a la grada, pues Samu Urbano apenas tuvo trabajo. La segunda parte sirvió para que Juan Arsenal agitara el árbol tras ver que el panorama no era demasiado positivo. Antes del primer cuarto de hora tras la reanudación ya había ajustado su esquema con dos sustituciones: Pedro León y Pedro Beda saltaron al campo por Álex Rubio y Pablo Ortiz y el Linares pasó a jugar con Juanfran como ‘falso 9’, con Beda por detrás, Dani Espejo como lateral derecho a pie cambiado y Pedro León en el izquierdo.

Y la respuesta del técnico rival fue clara, pues introdujo al trabajador Manu Garrido por el virtuosos Siles en la izquierda para evitar que Espejo y Chinchilla tuvieran superioridad en esa banda. El Linares mejoró algo, pues con Beda se encendió alguna luz por dentro pero insuficiente para generar peligro real. Sin 9 puro que pudiese cazar algo en el área y con algunos jugadores importantes alejados de su mejor nivel, el equipo azulillo fue incapaz de chutar con peligro entre los tres palos.

El Mancha Real, con Sergio arriba para los últimos minutos por un desgastado Juanfran, buscó el gol pero el partido murió sin que ni Samu Urbano ni Jorge Sánchez tuviese que exhibir cualidades. El reparto de puntos no sirvió demasiado a ninguno. El Linares se aleja a diez puntos del Real Jaén pero aumenta su distancia con El Palo, que perdió en Antequera. Por su parte, el Mancha Real ve como es el propio Antequera, en cuarta posición, el que se escapa a once puntos.