El Vélez desnuda a un Real Jaén sin ideas ni reacción

Ganar un partido fuera de casa se ha convertido en una misión casi imposible para el Real Jaén, que deberá recurrir a Tom Cruise y a su brigada para enderezar el rumbo lejos del Estadio de La Victoria. Entre marzo de 2016 —día 24— y octubre de 2017, los jiennenses solo acreditan un triunfo, el logrado esta temporada, el 2 de septiembre, en el campo del Melistar, con el gol de Migue Montes. Ni Ramón Tejada, ni José Manuel Barla ni Salva Ballesta, por ahora, encontraron la fórmula mágica para ganar a domicilio. El triunfo frente al Linares Deportivo resultó determinante para recuperar la ilusión y el optimismo, pero este Real Jaén es una colectivo que camina en el sendero de la irregularidad. El Vélez supo rentabilizar sus virtudes —es un equipo que ve puerta con facilidad— y, además, en esta ocasión, supo reguardar su meta, pese a que los blancos empezaron con fuerza y generaron dos ocasiones, por mediación de Álvaro García y Víctor Armero, las dos novedades que introdujo Salva en el equipo titular. Los blancos —ayer de morados— justificaron su débil pegada y su falta de definición en las metas rivales. El Vélez no se dejó impresionar y Lucas Cazorla tenía estudiado el compromiso. Sus jugadores olvidaron la timidez inicial y empezaron a crear situaciones de peligro. Emilio Guerra es un futbolista que conoce su oficio y busca rentabilizar sus llegadas ofensivas. Acaparó la mayorías de las accciones ofensivas de los veleños, pero no aprovechó ninguna. El cero reinó en la primera mitad, pese a que los visitantes buscaron una diana, con una doble opción protagonizada por Migue Montes y Víctor Armero. Iván solventó el peligro y le transmitió fuerzas a sus compañeros. Los dos conjuntos saben recurrir a la estrategia para anotar. El Vélez estuvo más acertado en el partido. Jonathan Rivera cometió un ingenuo penalti y ahí empezaron las complicaciones blancas. Joselillo batió a Emilio Muñoz. Salva miró a su banquillo y recurrió a Nando Copete, que salió al campo para tratar de forzar peligro por la banda derecha. Quedaba tiempo para lograr el empate, pero el Real Jaén es un conjunto que no acredita capacidad de reacción. Muestra impotencia y carece de ideas cuando va por detrás en el marcador. Tres de sus cuatro derrotas llegan marcadas por penas máximas claves para los tropiezos. Zule entró en el Vélez para aprovechar los espacios de los ayer morados, aunque el partido lo sentenció Lasly —protagonizó la jugada del penalti— en un remate de cabeza a la salida de un córner. Esa acción se produjo después de que Copete estuviera a un paso de empatar en un disparo de Migue Montes. Las prisas no fueron buenas consejeras para una Real Jaén sin capacidad de reacción e ideas. Cuatro derrotas en diez jornadas es una estadística decepcionante.