Calidad para el colectivo

Sergio Molina es un futbolista que está llamado a ser determinante en el nuevo proyecto que presenta el Real Jaén. El malagueño acredita calidad y experiencia en un equipo que pretende estar lo más arriba posible en una campaña en la que se estrena en el banquillo blanco Ramón Tejada. Molina está tranquilo y sabe que la pretemporada es una fase para compenetrar a los equipos, corregir los errores y ponerse a punto en el apartado físico. “Es lo que perseguimos para llegar lo mejor posible al primer partido contra la Balompédica Linense, como ya sucedió la pasada temporada. Aún quedan diez y trabajamos con la mente clara de seguir la progresión”, apunta el malagueño, que se convirtió en el máximo anotador del Real Jaén tras marcar nueve dianas. Tomó el relevo de Hugo Díaz, que en la fase final rescindió el contrato para fichar por el Tudelano. Hasta ese momento, el cordobés había marcado doce tantos, algunos de ellos espectaculares como la del derbi ante el Linares Deportivo.

Sergio Molina apela a la humildad y al trabajo diario en un grupo, el cuarto de Segunda División B, que otra vez estará marcado por las exigencia y la calidad de los conjuntos participantes. “Nosotros nos entrenamos con la idea de asimilar los conceptos que transmite el entrenador y con ganas de ayudar a los nuevos fichajes que han llegado”, dice el jugador, que empieza su tercera campaña en el Real Jaén.

Sergio Molina ya acumula dos goles en los encuentros amistosos, el último de ellos anotado en la victoria obtenida en el Trofeo Ciudad de Loja. Fue el futbolista que marcó las diferencias en el campo y gozó de más ocasiones para aumentar su cuenta particular y la del equipo blanco. El deportista le quita trascendencia a su actuación personal en tierras granadinas. “Cumplí con mi función en el campo. Es un paso más en el trabajo colectivo del conjunto”, asegura con satisfacción.