Ascenso épico en Ourense

Dos décadas de una gesta con mayúsculas en una liguilla de ascenso que se resolvió con un gol de diferencia. El Real Jaén fue fiel a su historia una vez más y se refugió en la épica para ascender a Segunda División A el 25 de junio de 2000 en el Estadio de O Couto de Ourense con el gol de Jesús Sierra de penalti en una jornada en la que la selección española fue eliminada por Francia en la Eurocopa con un penalti malogrado por Raúl González. La tarde en tierras gallegas no fue apta para corazones débiles, todo lo contrario. Fue una jornada de tensiones que terminó con un final feliz. El Real Jaén, entrenado por Juan Manuel Tartilán y Juan Antonio Albacete Anquela después de la destitución de Antonio Teixidó por la espiral de resultados negativos que puso en peligro el play off, se presentó al partido con pocas opciones de ascender después de la derrota una semana antes frente al propio equipo gallego en La Victoria (0-2).

El Ourense y el Gramanet, que jugaba en el campo de la Gimnástica de Torrelavega, partían con ventaja en la clasificación (7 puntos), pero quedaban 90 minutos por delante. Los blancos, con un grupo de 100 valientes aficionados en las gradas, no se rindieron en ningún momento y se sobrepusieron a todas las adversidades que surgieron en el partido. El meta José Esteban Yepes Berruezo sostuvo a los blancos con un catálogo de paradas en jugadas de estrategia, colectivas o individuales de los gallegos. Del Real Jaén se supo muy poco en ataque, máxime cuando a los 68 minutos fue expulsado el madrileño Tocho por una doble tarjeta amarilla. No se hundió el equipo, todo lo contrario, y en el 86 llegó el momento clave una combinación entre Antonio Rueda y Nacho Sierra terminó en penalti a este último. El colegiado Rubinos Pérez, que luego terminó en Primera División, no dudó en señalar la pena máxima. Jesús Sierra, un extremo granadino incorporado esta temporada procedente del Granada y con experiencia en la cantera del Barcelona, cogió el balón y engañó de forma perfecta al portero Ramón. El 0-1 situaba a los blancos cerca del regreso a Segunda A, pero también jugaba en Torrelavega, donde el equipo de Carlos Terrazas —ocho años después dirigió al Real Jaén— empezó a meter goles al Gramanet y en una maniobra con las redes de una meta consiguió más tiempo extra. El encuentro terminó en O Couto con unos jugadores del Real Jaén extenuados y que acariciaban la gloria en una gesta con todos los condicionantes en contra. Los cántabros marcaron el cuarto gol (4-1), pero media hora después, y ya en los vestuarios, el Real Jaén celebró el ascenso con una victoria histórica cuando nadie lo esperaba. Los catorce protagonistas del encuentro fueron Yepes, Rico, Quique Beltrán, Tocho, Chico, Rafita, Rueda, Jesús Sierra, Rubén Blaya y Robledo. Después participaron Nono (salió en el minuto 46), Cornago (52) y Nacho Sierra (52), mientras que el meta Emilio Muñoz, aún en activo y esta temporada en el Porcuna, y Sergio Pellicer, el técnico actual del Málaga CF de Segunda A, no jugaron.

Las escenas de júbilo se sucedieron en O Couto y en la Plaza de Las Batallas, donde la anécdota fue la lesión sufrida en la fuente por Miguel Sánchez de Alcázar, el entonces alcalde de la ciudad. Al día siguiente, el 26, recibimiento en la Plaza de Santa María con unos 6.000 aficionados que homenajearon a los héroes de O Couto. Juan Carlos Hidalgo fue el presidente de un ascenso con épica y suspense. La crónica de Diario JAÉN, firmada por José Eugenio Lara, titulaba: Jaén bendice el gol de Jesús Sierra y un reportaje con: De Ourense al cielo. Así es como el Real Jaén ha forjado su historia, ahora en serio peligro por las deudas acumuladas desde que se convirtió en sociedad anónima y por la labor de los consejos de administración.