Los fallos defensivos son letales

Las indecisiones y la falta de gol condenan al Linares Deportivo en el encuentro ante el Antequera

02 oct 2017 / 12:12 H.

El Linares Deportivo lo intentó, pero no consiguió imponerse ante el Antequera (0-1) en el partido disputado en el Linarejos. Para recibir a un conjunto con una identidad fundada en la de querer siempre el balón, el míster azulillo introdujo cambios cuyo fin eran dificultar el fútbol del rival. Aparcó su habitual 4-2-3-1 y dibujó un 4-3-3 con Sergio García de pivote y Pablo Ortiz y Juanfran como interiores con mucho vuelo. Ambos comandaron la presión alta de su equipo contra la salida antequerana y el plan funcionó durante los primeros veinticinco minutos, pues el Linares robó arriba en varias ocasiones y asfixió la salida de pelota rival. Además consiguieron disponer de varias ocasiones tras recuperar el esférico cerca del área. Admonio avisó en el minuto 4 en un córner y, posteriormente, llegaron las dos más claras: Primero José Manuel perdonó dentro del área tras una gran jugada de Juanfran y, después, Pablo Ortiz la pegó desde la frontal con todo a favor, pero Luisma salvó el tanto. Hasta entonces la posesión mayoritariamente era del Antequera pero el dominio era claramente azulillo gracias al trabajo sin balón.

Sin embargo, el equipo no aprovechó sus ocasiones y pagó caro su primer fallo defensivo en el 32. Chomfli se tragó un bote en el área tras un cambio de orientación y habilitó a Juanjo para que asistiese a Juanfran en el 0-1. Con el gol, el partido cambió radicalmente. El Antequera comenzó a exhibir su nivel y mostró qué clase de equipo es. Con una paciencia infinita para sacar el balón jugado, empezó a hacer inútil la presión local. Movió la pelota de maravilla, la circuló de lado a lado con una calidad sobresaliente y el partido fue un monólogo hasta el descanso. De hecho, en el 42, Robador salvó el 0-2. Aun así el paso por vestuarios sentó bien al Linares.

Volvió a recuperar la presión arriba duplicando su intensidad y el Antequera comenzó a fallar el primer pase. Los cambios agitaron el encuentro y Braim, que entró por Siles, fue dinamita por banda. Desbordó siempre y fue el foco de principal peligro. Sin embargo, la mayoría de ataques vinieron de centros laterales y sin delantero rematador en el área las ocasiones no llegaron. Después en el 94’ el propio Pekes intentó una vaselina ante el meta y éste le derribó en la frontal. Roja directa y el Antequera, sin cambios, tuvo que colocar a un jugador de campo de portero. Sergio Ortiz, especialista a pelota parada, tuvo la oportunidad del partido para poner el empate de falta directa. El gol no llegó y los 3 puntos vuelven a volar lejos de Linares, que sufre su segunda derrota consecutiva.