Los elegidos para llegar a la cima

El plazo expiró y ya no hay marcha atrás hasta que termine la temporada. Salva Ballesta y José María Pajares, primer y segundo entrenador, disponen de los veintidós jugadores con los que lucharán por dos retos casi obligatorios en una entidad que cuenta con 95 años de historia: jugar el play off y después luchar por el regreso a Segunda División B. Ballesta cuenta con la plantilla que deseaba cuando el 25 de septiembre fue presentado como técnico jiennense. Su idea era contar con dos futbolistas por demarcación, porque es consciente de las exigencias de un torneo largo —cuarenta y dos jornadas— y partidos en campos con terrenos de juego de reducidas dimensiones y la mayoría de hierba artificial. Esa polivalencia y ese equilibrio origina que el entrenador apueste por las continuas rotaciones. Su máxima es que los futbolistas lleguen con el “depósito lleno de gasolina” si el Real Jaén se clasifica para las eliminatorias de ascenso, una posición que aún no es segura al quedar aún dieciséis partidos para el final de la competición regular.

Las perspectivas son esperanzadoras debido a que el conjunto blanco acredita catorce compromisos sin perder de forma consecutiva, con once victorias y tres empates. El Real Jaén ha encontrado el camino de la regularidad con un equipo ya asentado y donde han mejorado sus resultados fuera del Estadio de La Victoria con triunfos en campos complicados, como el del Huétor Tájar, el Almería B, el Ciudad de Torredonjimeno o el de El Palo. En casa es una máquina que funciona de forma sincronizada. Ha ganado todos sus compromisos, excepto los empates con el El Palo y el Martos CD. Tanto con Valenciano como con el actual entrenador se han visto pasajes de buen juego, aunque el colectivo ha tenido dificultades para solventar algunos encuentros. El cartel de favorito le ha perjudicado a los jiennenses en momentos puntuales del torneo. Aún quedan encuentros importantes, tanto en casa como fuera. Es el momento para prolongar la excelente racha de resultados.