Fran Carles: "Sabemos que vamos a sufrir"
Fran Carles se besó una y otra vez el escudo de la camiseta nada más marcar el tanto de la victoria del Linares sobre el Castellón. Era la manera de reivindicar que es un azulillo más y que, al igual que su padre, esa elástica va más allá del sentimiento. El canterano es un chaval humilde de barrio que encarna como nadie el espíritu de una ciudad, de clase trabajadora, tradicionalmente marginada y que no pasa, precisamente, por su mejor momento. Por eso, lo primero que hizo, tras anotar el gol, fue dirigirse al fondo gol, donde se ubican muchos de los chavales con los que ha compartido grada hasta que Manuel Tomé lo hizo debutar en Segunda B.
Fran Carles también se acordó de Popi Juan, fallecido recientemente y amigo personal, y de todos aquellos aficionados que, como él, bajaron hasta los infiernos para empezar de cero. Es el linarensismo en esencia, por su forma de venerar este deporte, y una especie rara en un fútbol moderno, en el que la lealtad a un club y el respeto del aficionado no siempre se conjugan en la misma dirección. Dice que, el sábado, dieron un “pequeño paso” hacia el ansiado ascenso, pero que “ahora queda lo peor”. “Sabemos que vamos a sufrir, que nos van a poner en numerosos apuros. Lo importante es aguantar como sea la primera media hora. Si pasamos ese tramo sin encajar goles, podremos soñar”, explica.
El mediocentro, que, junto con David Gámiz y Lopito, fue el mejor de los azulillos, reconoce que el Castellón sigue siendo el favorito. “Aunque llevamos una pequeña ventaja, ellos son un equipazo. Lo demostraron en el segundo tiempo, por lo que debemos ser más cautos que nunca”, insiste. Fran Carles, no obstante, cree que el Linares también dispone de argumentos futbolísticos para hacer daño. “Estoy seguro de que tendremos nuestras oportunidades. Lo importante es estar centrados en defensa, no cometer errores e intentar aprovechar alguna de las ocasiones que tengamos”, manifiesta. Fran Carles recuerda, del mismo modo, la fortaleza del Linares fuera de su estadio. “Muy pocos equipos han sido capaces de marcarnos más de dos goles en un partido. Somos un equipo competitivo tanto en Linarejos como a domicilio. Por eso, debemos estar tranquilos y jugar de la misma manera de siempre”, reitera. El centrocampista linarense asegura que el vestuario está mentalmente fuerte. “Vamos a disfrutar como hemos hecho hasta ahora. Eso es lo que nos ha llevado hasta aquí, y no lo podemos cambiar ahora”, declara el centrocampista del Linares.
Afición. Sobre la afición, Fran Carles solo tiene palabras de agradecimiento después del apoyo incondicional del pasado sábado en Linarejos. “Es increíble la manera de animar, no solo en Linarejos, sino también las horas previas al partido. Se lo merecen todo y estoy seguro de que nos apoyarán en Castalia”, confía. No es el único jugador al que todavía se le pone la piel de gallina al recordar lo del pasado sábado. Su compañero en la medular, David Gámiz, se expresó a través de su cuenta de Twitter. “Desde el primer día, me siento uno más de aquí, aunque venga de fuera”.
También habló de la afición en las redes sociales el central Jonathan Rosales “Primeros noventa minutos ganados, ya solo queda un paso. Lo más difícil, pero, al mismo tiempo, lo más bonito. Lo de Linarejos, sin palabras. Solo dar las gracias”. Todos los jugadores coinciden en que el apoyo de la hinchada azulilla fue determinante en el resultado y esperan que los mil seguidores que se desplacen hasta Castellón respalden de la misma manera al equipo en Castalia. La unión entre la plantilla y la grada es total, como no se recordaba en año en la ciudad de las minas. Para Torres, esa “comunión” debe continuar hasta el último minuto de la promoción de ascenso. “Son el mejor aval que tenemos. Los necesitamos, porque con ellos somos más fuertes”, destaca el entrenador.