Guantes con proyección

Una oportunidad bien aprovechada y que demuestra que el trabajo con la cantera da unos excelentes resultados. El CD Cuadrilátero de Boxeo de Jaén demostró en Béjar (Salamanca) su imparable crecimiento con una estadística y una imagen espectacular. Compitieron Marta López del Árbol (júnior 52 kilos) y Ángel Villén Martos (joven 75). Ambos corrieron suerte desigual, aunque idéntica experiencia: poder repetir en este tipo de torneos en la que conviven jóvenes de toda España para adquirir experiencia en el ring. Marta López obtuvo la victoria en sus dos enfrentamientos en la categoría de boxeo femenino. Primero en su debut frente a la asturiana Erika Martínez, a quien superó por decisión unánime de los jueces. En su segundo no hubo que ir a las cartulinas de los árbitros, ya que el responsable paró el combate en el tercer asalto debido a la superioridad de López frente a la también asturiana Aida Llara. De esta forma se impuso por una clara ventaja técnica. La deportista se encuentra feliz por dos motivos: primero por adjudicarse una actividad que cuenta con gran repercusión y después por convivir con un grupo importante de promesas nacionales. “Fue algo maravilloso y una experiencia irrepetible por la calidad de los participantes en el torneo”, asegura. Por su parte, Ángel Villén disputó tres combates. Se estrenó con victoria ante el bilbaíno Adrián Diez Echevarría. En su segundo enfrentamiento le tocó “bailar” con uno de los mejores púgiles del campeonato, el asturiano Gabriel Vargas, quien ganó a Villén por decisión dividida de los jueces. Igual suerte corrió en el último enfrentamiento frente al sevillano Andrés Fernández en un ajustado resultado. Junto al equipo de competición también viajó el árbitro Francisco José Ávila, que fue elegido mejor juez. Recibió el galardón de la mano del presidente de la Federación de Castilla y León de Boxeo, Pedro Retuerto Marqués.