Esfuerzo con recompensa

Sebastián Tíscar cumple la meta de completar un ultramán de 515 kilómetros para colaborar con Ales

11 oct 2018 / 12:05 H.

El deporte y la solidaridad se combinaron de forma perfecta en la causa protagonizada por Sebastián Tíscar. El villacarrillense finalizó el reto en el Ultramán Non-Stop de 515 kilómetros, una prueba celebrada en Puebla de Alcocer (Extremadura) y en el que recaudó fondos para Ales (Asociación para la Lucha contra las Enfermedades de la Sangre), que está formada por madres y padres de niños con cáncer. Tíscar exhibió de nuevo su resistencia en este tipo de competiciones y acabó la competición con un tiempo de 33 horas. Todos los deportistas participantes en la prueba tomaron con una causa solidaria por bandera y el jiennense decidió que fuera Ales la beneficiaria de su esfuerzo. Así, el dinero que Tíscar logró procedentes de patrocinios irá destinados a la asociación. El deportista se mostró eufórico después de lograr el reto y dijo: “Cuando me embarqué en este hito solo pensaba en ayudar desde mi humilde posición a los niños de Ales, que han pasado o están pasando por el proceso de la enfermedad. Para mi ha sido un orgullo poder echar una mano a través del deporte”, aseguró emocionado. El atleta fue recibido en el Ayuntamiento de Villacarrillo y homenajeado por los padres de Ales de este municipio. Ese gesto lo agradeció. “Fue un acto emotivo y en el que relaté la experiencia vivida en Puebla de Alcocer. La carrera fue exigente con un trazado muy duro, pero afortunadamente completé los 515 kilómetros de recorrido”, aseguró. En el ultra king solo se compite contra el reloj y contra uno mismo, porque no fue una prueba competitiva. El trazado se dividió en natación, con 10 kilómetros, 423 de ciclismo, y una doble maratón con 82 kilómetros totales, con un tiempo permitido por la organización de 36 horas. Sebastián Tíscar lo cumplió de sobra y le da más mérito a la gesta conseguida en tierras extremeñas.

COLABORACIÓN. Este tipo de pruebas busca inculcar un espíritu de hermandad entre todos los que forman parte de la aventura y el deporte, por lo que está permitido colaborar entre los equipos en lo que a avituallamientos y material se refiere. “Esta es una de las claves por lo que la prueba que se celebró en Extremadura es un ejemplo de solidaridad, superación y convivencia entre todos los participantes”, aseguró Sebastián Tíscar.