El vértigo del descenso en bici

Juan Francisco López Navas termina quinto en el Campeonato de Europa en la categoría máster 45

19 abr 2018 / 08:43 H.

La experiencia y la calidad siempre han sido los avales del éxito de Juan Francisco López Navas, uno de los pioneros en las pruebas de descenso en bicicleta de montaña en la provincia de Jaén. El linarense imparte su magisterio en cada bajada y contagia la pasión y la adrenalina en las pruebas donde compite. El último precedente en el que completó una destacada actuación fue el Campeonato de Europa en la categoría máster de 45 años, una competición que se disputó en Lousa (Coimbra, Portugal). López tuvo que afrontar un circuito, que tenía cuatro kilómetros de cuerda y un desnivel de más de 1.000 metros. El trazado constó de tres partes bien diferenciadas, una primera rápida a base de peraltos y saltos enlazados, una segunda más inclinada compuesta por una sucesión de toboganes y una última con una fuerte pendiente hasta la meta. En la manga clasificatoria el piloto linarense se clasificó tercero con un tiempo de 5 minutos y 19 segundos, pero en la decisiva cambió la situación debido a la lluvia. El trazado cambió y estuvo caracterizado por el barro, lo que a juicio de Juan Francisco López, benefició a los corredores del norte de Europa y a los franceses e italianos. Esa dureza resultó determinante para que el linarense terminara, finalmente, en el quinto puesto de la general, con un registro de 5 minutos y 33 segundos. El transalpino Óscar Colombo logró la medalla de oro con 4 minutos y 47 segundos. Mientras, el jiennense Juanjo Cazalilla también brilló en tierras portuguesas y terminó sexto en máster 35. La próxima cita marcada en el calendario es el Open de España en El Raso (Ávila), aunque López aún desconoce si estará presente. Sí tiene fija su presencia en el Mundial, que se disputará del 15 al 18 de julio en Valnoord (Andorra), y en el Nacional de descenso, que se disputará en Rute (Córdoba) el 30 de septiembre.

análisis. Juan Francisco López se muestra satisfecho de la imagen ofrecida en Portugal y solo lamenta las condiciones en las que afrontó la segunda manga del Campeonato de Europa. “Estoy seguro de que hubiera conseguido una medalla de no ser por las condiciones del circuito después de la lluvia caída. Pese a todo, el análisis es positivo y me encuentro satisfecho del rendimiento en la competición”, comenta. Su meta pasa por entrenarse para llegar en un buen estado de forma al Mundial de Andorra y al Nacional en la provincia de Córdoba. “Son pruebas atractivas y en las que trataré de destacar, pese a la dura competencia de los rivales”, afirma el piloto linarense, garantía de eficacia en cada carrera que compite.