El Atlético sabe sufrir para pasar de fase
Entrará otra vez en el bombo con los goles de Mario Hermoso y Carrasco
El Atlético de Madrid superó (0-2) al Salzburgo y sacó el billete a octavos de final en la Liga de Campeones, una final anticipada para ambos equipos que se quedó el conjunto español gracias a un gol de Mario Hermoso en el primer tiempo, que bastó ante un rival que no dejó de intentarlo sin éxito y sentenciado por Carrasco ya en los últimos minutos.
Los de Diego Pablo Simeone jugaron con el marcador sin perder la concentración en el campo austriaco. El Atleti selló su portería y fue solidario en el trabajo defensivo, pero no tuvo el control, permitiendo ocasiones a un Salzburgo que perdonó, con dos palos y un mano a mano con Oblak. El premio fue para los rojiblancos, que pasan segundos del Grupo A, al sorteo del próximo lunes. Si en Champions te la juegas fuera de casa, y tu rival también, está claro que vas a sufrir. El Atleti lo hizo de inicio porque el Salzburgo le ganó en intensidad, saltó con una marcha más el equipo local. Así, el cuadro austriaco borró el centro del campo y se dedicó a correr en cada balón indeciso de los madrileños. A los dos minutos, Berisha protagonizó el susto mayor, con un balón al palo de la meta de Oblak. A los del ‘Cholo’ les costó 20 minutos cambiar el ritmo del partido y dejar de sufrir a la espalda de la defensa. Sin pérdidas y con más balón el Atleti, a los austriacos les costó entonces el ataque posicional y por fuera.
Joao Félix se había ofrecido y mostrado en ese tramo complicado en el que el Atlético apenas pisó meta rival. Lo hizo con un robo de Koke, pero su ocasión no se transformó en gol rojiblanco.