El Atlético destrona al Madrid

Los colchoneros superan al equipo blanco con un doblete de Diego Costa, que estuvo estelar

16 ago 2018 / 08:38 H.

El Atlético de Madrid se alzó con su tercera Supercopa de Europa tras imponerse en la prórroga (2-4) al Real Madrid en la final celebrada en el Estadio Lilleküla de Tallin, con un gran Costa y los goles de Saúl y Koke en esa prolongación que terminó con el reinado blanco, para comenzar con un título el ambicioso proyecto rojiblanco.

Un rey de Europa que ahora es rojiblanco, después de dos años blancos, como lo fue en 2010 y 2012. El tres de tres atlético en esta final no estuvo claro hasta la prórroga, y eso que comenzó con el 1-0 en el primer minuto. El Madrid supo reaccionar, pero no matar, y el doblete de Costa alargó la final. El campeón de la Champions pareció afianzarse sobre el césped, pero dos zarpazos del Atleti destronaron al Madrid de Julen Lopetegui, que comienza con revolcón y seguro el runrún de buscar o no refuerzos a un equipo sin Cristiano Ronaldo. La rivalidad madrileña regaló a la Supercopa un ritmo y una emoción que no tiene de serie este torneo.

El Madrid no se puso nervioso y generó poco a poco su fútbol, con buena profundidad de Bale y Asensio y un centro del campo que se adueñó de la final, más allá de la zozobra de Casemiro. La situación no era nueva para los de Cholo, con ventaja y resguardados, pero no tan juntos como para evitar ocasiones del rival, ni precisos para volver a asomar a la meta del costarricense. Ni Lemar, ni Griezmann aparecieron, ni Navas tuvo más trabajo en un primer tiempo blanco desde ese primer minuto. Los de Lopetegui perdonaron, Oblak se esmeró en un taconazo de Asensio, hasta que Bale encontró el vuelo de Benzema para el 1-1 a la media hora. El balear falló en ese paso al frente que se le reclama y tras el descanso dejó su sitio a Luka Modric. El Atleti prescindió de Griezmann, sin apenas pretemporada. Con el croata, el Madrid recuperó esa superioridad en el centro del campo, a pesar del gran despliegue rojiblanco de Rodri. Un dominio que recibió el regalo en forma de penalti de Juanfran, inocente en las manos que pusieron el balón en los once metros para que Ramos hiciera el 2-1, cuando la pretemporada comenzaba a pesar más que el pique de un derbi en una final continental. Costa en posición para firmar su doblete a 10 minutos del final (2-2). Pero en la prórroga, el Atleti fue superior al Madrid y dos zarpazos de Saúl y Koke coronaron al Atlético supercampeón de Europa.