De Marchi remata en una fuga la etapa más larga de La Vuelta

Sin respiro. La Vuelta no da un día de descanso a los ciclistas que quieren subir al podio en Madrid, y en lo que estaba marcado como un día para escapada bidón y relax atrás, el francés Thibaut Pinot (FDJ) decidió “jugar a ciclista” y filtrarse en la fuga del día, obligando al Movistar a trabajar atrás. Entre tanto revuelo, Alessandro De Marchi (BMC) aprovechó para atacar a sus compañeros del grupo delantero, logrando una renta suficiente para entrar en meta en solitario y sumar su tercera victoria en La Vuelta, la última fue en Alcaudete en 2014.

La etapa más larga de la edición, como presagiaba Omar Fraile en la salida, fue también de las de mayor desgaste. Más de 100 kilómetros fueron necesarios para que se formara la fuga buena, después de que nombres como Vincenzo Nibali, Thomas De Gendt o Fabio Felline, cazaetapas profesionales, trataran de romper la armonía del pelotón en varios intentos por escaparse, sin éxito.

Fueron 19 los que finalmente lograron entrar en el corte bueno, con Pinot, candidato al podio pero con más de dos minutos perdidos por los abanicos de hace unas jornadas, como nombre más destacado. Junto a él De Marchi, Franco Pellizotti (Bahrain-Merida) —el más veterano de esta edición de La Vuelta—, Dylan Teuns (BMC), Rafal Majka (Bora) o Nicolas Roche (BMC), corredores de gran calidad y finalizadores de fugas.

Los fugados llegaron a tener más de cuatro minutos de ventaja, lo que obligó al Movistar a ponerse al frente del pelotón —el equipo del líder filtró a Jack Haig, por lo que se desentendió de trabajar— para no permitir que Pinot tomara una renta que a la postre podía resultar definitiva de cara a la clasificación general final.

El francés, después de un gran trabajo de su compañero Leo Vincent, atacó en varias ocasiones, pero el demarraje definitivo fue el que realizó De Marchi junto al colombiano Jhonatan Restrepo (Katusha), a quien dejaría atrás en el último muro de la etapa, de más del diez por ciento de pendiente, marchándose hasta meta en solitario.

MOVIMIENTOS. Todo no fue la fuga. Los jefes de filas, conocedores del final trampa, decidieron moverse buscando unos segundo de margen que, en una clasificación tan apretada, podían valer su peso en oro. Atacó Nairo Quintana (Movistar), a quien siguió Miguel Ángel López (Astana), también probaron fortuna Gorka Izaguirre (Bahrain-Merida) o Michael Woods (Education First), pero ninguno logró abrir hueco con el grupo.

La etapa de hoy, entre Madroñedo y el faro de Estaca de Bares, es propicia para una llegada al esprint de un grupo reducido.