Baches murcianos en el camino

    13 feb 2016 / 10:31 H.

    Se acercan curvas peligrosas en el calendario más cercano del Linares Deportivo. Y comienza por la cita de mañana en el Estadio Francisco Artés Carrasco de Lorca. El conjunto de Antonio José García, “Torres”, llega en el momento más delicado de la temporada. Después de haber estado en una zona relativamente cómoda, las dos recientes derrotas le han dejado en puestos de promoción. Todo lo contrario le sucede a La Hoya Lorca. A pesar de ir de más a menos durante todo el año, sus dos últimos triunfos le han devuelto la confianza a los de Paco García, que encaran el choque con los mineros con la moral por las nubes, por lo que será, además, un partido de contrastes en el aspecto anímico.

    El conjunto murciano se organiza sobre el césped con un 4-2-3-1, tratándose de un equipo enormemente trabajador y solidario en defensa. Con un portero que dota de gran seguridad atrás, centrales de gran envergadura y buenos centrocampistas tanto en la contención como en la salida de balón, los problemas para La Hoya se centran en tres cuartos de campo. Sin referencias claras arriba para jugar de nueve y tras varias pruebas, el fichaje de Francis Ferrón se antojó fundamental, siendo titular habitual en las alineaciones, aunque aún no ha visto puerta como lorquino. El principal peligro del conjunto murciano se encuentra en la velocidad de sus atacantes, en un equipo que se siente cómodo en partidos de transiciones rápidas, algo que sin duda agradece su jugador más talentoso, el extremo derecho Rubén Martínez. Descaro, velocidad y capacidad para echarse el equipo a la espalda son sus principales virtudes. Junto con él, en la mediapunta destaca la figura de Poley, sin excesiva regularidad en el juego pero especialista botando las acciones a balón parado, una de las principales bazas de La Hoya.

    Partido muy exigente, por lo tanto, el que le esperan a los azulillos, obligados a puntuar si no quieren ver como se alarga su mala racha y se encienden todas las alarmas. Y más tratándose del duelo previo antes de recibir al líder del Grupo IV de Segunda B, el Real Murcia, en el Municipal de Linarejos. Dos huesos duros de roer que pueden marcar el transcurso del fin de temporada. Pese a todo, la afición sigue confiando en el grupo de jugadores dirigido por Torres y en su capacidad de reacción. Quedan por delante muchas jornadas y muchos en puntos en juego. La unión de todos los estamentos del club se prevé fundamental para luchar sin cuartel por el objetivo de la permanencia en la División de Bronce, en el año del regreso.