Una guitarra santistebeña que resuena en Macedonia

Enrique Muñoz triunfa con la presentación de Latino, su último disco

17 oct 2018 / 11:18 H.

Es el guitarrista más conocido de El Condado. Su talento no solo es admirado en su tierra, sino que tampoco presenta límites geográficos. Y así lo demostró el propio Enrique Muñoz, cuya guitarra recorre, junto a él, el mundo, para ofrecer sus mejores conciertos. Así llegó al XXVII Festival Internacional de Música Clásica de Bitola, en Macedonia, uno de los países de la antigua Yugoslavia.

Este encuentro tiene una gran aceptación entre los más melómanos. El concierto inaugural lo ofreció la Orquesta Filarmónica de Macedonia, pero el talento jiennense se manifestó con los acordes de Muñoz, que ofreció uno de los espectáculos más aclamados.

Fue una actuación especial que le permitió al guitarrista presentar Latino, su tercer disco. De esta manera, el jiennense ofreció un repertorio basado en este trabajo, con una primera parte dedicada a los compositores españoles y, una segunda, para los latinoamericanos. Por ello, sonaron temas como Canción del emperador, de Luys de Narváez; Castillos de España, de Federico Moreno Torroba, y algunas obras de Francisco Tárrega, como Capricho árabe, Tango, Lágrima y Recuerdos de la Alhambra.

Una lluvia de aplausos recayó sobre el guitarrista, más aún cuando tocó Estudio sin luz, del linarense Andrés Segovia. Durante la última parte de su actuación, Muñoz se entregó en cuerpo y alma a su público con títulos como Un día de noviembre, de Leo Brouwer; Estudio XI, de Heitor Villa-Lobos; Milonga, de Jorge Cardaso, y El último trémolo, de Barrios Mangore.

Fue una velada llena de arte en la que los espectadores se perdieron en la vibración de unas cuerdas de acento jiennense. Y es que, el guitarrista, que comenzó su gira en Japón, ha hecho sonar su guitarra por países como Vietnam, Polonia, Turquía y Estados Unidos, entre otros, llegando a considerarse como un prodigio musical. Así, y tras este último éxito en Macedonia, Muñoz seguirá presentando su trabajo y enamorando al público con su música.

El lenguaje musical
es universal

Para muchos, las barreras idiomáticas que supone viajar se pueden convertir en un problema, sin embargo, el músico santistebeño Enrique Muñoz sabe comunicarse con los acordes de su guitarra española, la misma con la que recorre el mundo para hacer llegar las composiciones de grandes artistas, como hace con el linarense Andrés Segovia, cuyos temas le acompañan.