Una deuda familiar saldada, un regalo para otras generaciones

Marta Isabel Rodríguez gana el XXV Premio para Escritores Noveles de Diputación

30 nov 2016 / 12:18 H.

Sentadas en la patio trasero de su casa, una tarde de verano. Ahí nació este libro pero sus historias hunden sus raíces hasta perderse en el tiempo. Marta Isabel Rodríguez presenta Cuentos que me contaba mi abuela, obra ganadora de la vigésima quinta edición del Premio para Escritores Noveles de la Diputación. La autora, granadina residente en Úbeda desde hace seis años, ha rescatado las historias que su abuela le contaba en su infancia para conservarlas para siempre. Su relato convenció al jurado de este premio, que estuvo presidido por Juan Eslava Galán.

“Son 18 historias que proceden de la tradición oral de las provincias de Jaén y Granada, las que me contaba mi abuela y a ella, sus padres. A lo largo del libro cuento, además, la historia de esos cuentos, cómo han viajado hasta llegar a mis manos y cómo yo los he escrito para difundirlos y conservar para siempre esa tradición oral”, explica la autora, que es, además, profesora de Piano en Huelma.

Aficionada desde siempre a la literatura y la escritura, cuenta, tenía olvidadas esas historias de su infancia. “Recordé los cuentos y pedí a mi abuela que me los volviera a contar”, explica. Así, pluma en mano, fue transcribiendo, un proceso que le llevó bastante tiempo. Lo mejor de toda la experiencia, confiesa, fue revivir aquellos recuerdos de la infancia de voz de su abuela. Era una deuda con su abuela que ha cumplido.

En la literatura infantil actual, apunta la escritora, los títulos no dejan de repetirse, de Cenicienta a Blancanieves. “Estos cuentos renuevan ese panorama”, defiende. “Estos cuentos, además de historias de princesas, también tienen toques humorísticos, hablan de animales, de costumbres, de oficios del campo”, destaca. “Como los autores no están limitados a exigencias comerciales ni editoriales, sus autores tenían una libertad creativa y una imaginación sorprendente. Tienen mucha riqueza de expresiones, de elementos mágicos”, añade.

“He intentado, además, realzar en estas historias elementos de la cultura autóctona andaluza, como expresiones, comidas...”, enumera. A lo largo del libro, además de los cuentos, también escribe anotaciones sobre estas palabras, en las que explica su significado, y contextualiza cada historia. Más de dos años, dice, tardó en darles forma, investigar y revisarlos. Pero no ha acabado: “Todavía hoy sigo investigando la tradición oral”. Mientras, además, adelanta que tiene entre manos una novela y varios relatos.

En la presentación, estuvo acompañada por el diputado de Cultura, Juan Ángel Pérez, y su padre, José Antonio Rodríguez. “Esta autora recoge esas historias antiguas que todos recordamos de pequeños, que no se sabe muy bien cómo surgieron, pero que han llegado a nosotros de boca en boca, que han pervivido así en nuestra memoria colectiva”, reconoce el diputado. En este certamen, que cumple 25 años, han participado más de 450 jóvenes escritores a lo largo de su historia. “Ha permitido estimular la gran creatividad que atesora la provincia de Jaén”, resalta el diputado.