Un banco de peces inunda de arte la Diputación de Jaén

El mundo marino es excepcional para aquellos que son amantes de descubrir cómo son las criaturas que se esconden entre las aguas de los mares y océanos. Ante los ojos de los más pequeños, los peces son seres muy llamativos o, al menos, así lo vivió el artista jiennense Miguel Ángel López, que veraneó durante su infancia en Cambrils. Allí conoció la pesca, la lonja y la navegación aficiones que luego trasladó a la costa andaluza y que le sirvieron de inspiración para, décadas después, crear Escamas de plata, una muestra que el pintor presentó en la sala de exposiciones del Palacio Provincial.

“Esta exposición surge como una vuelta a mi niñez, una mirada atrás en el tiempo, mi vivencia en Barcelona junto a mis padres y mi hermana, mis abuelos, tíos y primos, estos últimos muy relacionados con el mar y la pesca. Fueron momentos vividos y plasmados, ahora, en la que ha sido y será mi gran pasión: el mar. De ahí nació la idea de preparar esta muestra”, comentó el artista, que estuvo acompañado por la diputada de Igualdad, Francisca Medina, quien le dio la bienvenida a la Diputación e indicó que los jiennenses podrán contemplar esta “fantástica” obra hasta el próximo 7 de diciembre.

Lo llamativo de Escamas de plata, además de su atractiva temática y su juego con los colores, es que López no solo hace uso de técnicas como acuarela y óleo sobre madera, sino que, además, usa el soporte de sus pinturas para jugar con la presentación y conformar, por ejemplo, instalaciones en las que recrea un banco de peces. “Hay, además, un módulo expositivo que cuenta con una composición de 30 cuadros pequeños de dimensiones. Paralelamente, he recreado una representación formada por tacos de madera en los cuales aparecen peces, en ocho unidades, y tres caballitos de mar”, apuntó López.

El catálogo de esta colección está presentado por el presidente de la Diputación Provincial, Francisco Reyes, y el pintor, académico y miembro de la Asociación de Críticos de Arte, Miguel Viribay, quien le dedica al autor palabras de exaltación. En su prólogo, Un universo fundido, añadió: “A mi manera de ver, la obra de Miguel Ángel López se puede contemplar desde una perspectiva lineal. Su mundo es el mismo y cambiante. Mantiene una clara apuesta por la estética de raíz y síntesis figurativas”.